domingo, agosto 12, 2007

CAJONEADOR O CAJONERO

Cajoneador o Cajonero
Como un homenaje a Caitro Soto se ha organizado un Concurso Nacional de Cajón Peruano a llevarse a cabo en varias fechas durante el mes de Julio, cuya final es el 19 de Julio, día en que se recuerda un aniversario más de la sensible desaparición de Caitro Soto ocurrida el 19 de Julio de 2004. Santiago Venturo Ferré escribió algo al respecto, en homenaje a Caitro y el cajón, donde dice lo siguiente: 'Al que toca piano se le dice "pianista", al que toca guitarra... "guitarrista", el "violinista" toca el violín la trompeta el "trompetista" y el cajón el "cajonista". (...) El concepto hecho palabra en cada cual, se extiende con el sufijo ista, es por tal motivo en que insisto de que la verdadera denominación del instrumentista que toca el Cajón es Cajonista'... es la opinión de Santiago Venturo Ferré.

Pero Santiago Venturo Ferré se olvidó de que al que toca el timbal se le llama "timbalero", al que toca el bongo se le dice "bongocero", igualmente existe el maraquero y otros instrumentistas que no llevan el "ista".

Todo ello trae a mi mente que hace dos años alguien lanzó una inquietud en un grupo cultural peruano sobre la palabra "cajoneador". Inquietud que provino después de que yo la utilicé al escribir "El Cajón y el Vals Peruano". La persona aquella se preguntaba, con justa razón, porque se le llamaba "cajoneador" al que toca el cajón si la denominación debería ser "cajonista", si es que seguimos la regla de llamar guitarrista al que toca la guitarra, baterista, flautista, pianista, violinista, etc, a los que tocan los respectivos instrumentos musicales. Considero importante el que si alguien no está de acuerdo con algo o tiene alguna duda, debe expresar su punto de vista o comentario al respecto porque, aunque parezca mentira, del intercambio de pareceres uno aprende más, motivándonos también a investigar un poco más y/o traer a nuestra mente algo que podamos saber pero que estaba dormido debido a que nadie nos lo preguntaba. Por ejemplo, en una oportunidad alguien me preguntó sobre el uso del artículo "los" antes del nombre "Barrios Altos". Una pregunta sencilla que tenía, más que todo, inquietud gramatical, hizo que me acordara lo que había leído sobre la historia de Lima y sus calles; aclarando la inquietud aquella y explicando, a la vez, el origen del nombre Barrios Altos o Los Barrios Altos que muchos desconocían y que yo lo sabía pero que lo tenía durmiendo en mi mente hasta que alguien tuvo una duda gramatical. En muchas reglas aparecen excepciones. La de la palabra "cajoneador" es una de ellas. Estas excepciones son aceptadas, a veces, debido al uso o costumbre de quienes hacen uso de la palabra en cuestión. Al ser el cajón un instrumento musical de origen peruano, entonces se acepta el uso o costumbre que se da en Perú para nombrar a la persona que toca el cajón. Eudocio Carrera Vergara en su libro "La Lima Criolla de 1900", edición corregida y aumentada, Lima 1954, utiliza la denominación "cajonero". En "Historia de la Canción Criolla" de Aurelio Collantes, Lima 1956, se utiliza las denominaciones "cajoneador" y "cajonero". César Santa Cruz Gamarra en su libro "El Waltz y el Valse Criollo", Lima 1977, utiliza la palabra "cajoneador". Aquellas referencias, de personas que vivieron las jaranas de la primera mitad del siglo XX, nos dan a conocer que desde hace muchos años se viene utilizando, indistintamente, las denominaciones "cajoneador" y "cajonero" para referirse a quien toca el cajón y, vuelvo a recalcar, por ser el cajón de origen peruano, se acepta el uso o costumbre que se haya adoptado en Perú. Esto queda demostrado en la explicación que le dio la Real Academia Española (RAE) a quien le hizo llegar la consulta respectiva sobre cual era la denominación correcta del instrumentista que toca el cajón: "En los diccionarios de español general y en los diccionarios de términos musicales que se encuentran a nuestra disposición, no figura ningún término para designar al instrumentista que toca el cajón. No obstante, en textos de temática musical se documentan las voces cajonista -preferentemente para referirse, en España, al que toca el cajón flamenco- y cajoneador -usada en Perú para referirse al que toca el cajón en la música folclórica peruana-. En ambos casos, se trata de acuñaciones correctas, fieles a las reglas de formación de palabras del español". Los españoles son los que, en los últimos 25 años, han introducido la denominación "cajonista" como una manera más de tratar de identificar al cajón como de ellos. A mí no se me ocurriría llamarlo de esa manera puesto que el cajón es peruano y al que lo toca se le ha venido llamando "cajoneador" o "cajonero". La RAE creo que cae en el juego de los que pretenden identificar al cajón como de origen español, ya que al llamarlo cajón flamenco lo está identificando como del flamenco, cuando en realidad el cajón es peruano y punto.

Hace un año le comenté sobre esto a Rafael Santa Cruz, autor del libro "El Cajón Afroperuano", y él me dijo lo siguiente: "Recién a fines de los años setenta escuché alguna vez lo de 'cajonista', antes siempre se dijo cajonero y cajoneador. Fue un intento de los exponentes de lo que se podría llamar la 'nueva canción peruana'. Movimiento que en los setentas empezó a darle otro tratamiento a la música peruana, en textos, armonías e incluso melodías, que tomaban de lo popular y folklórico para expresarse de forma más contemporánea (por decirlo a mi manera). O sea que tampoco en esto son 'pioneros' los españoles con respecto al tema del cajón." La reconocida musicóloga, compositora e investigadora de nuestro folklore, Chalena Vásquez, también ha empleado la denominación "cajoneador" en un artículo de ella sobre el cajón. Según lo que he podido observar, tanto "cajoneador" como "cajonero" han sido utilizados indistintamente de la época. No es similar al caso del valse o vals en el cual los criollos antiguos eran quienes solían llamarlo valse. En el Perú debemos seguir utilizando la denominación que siempre le hemos dado a quien toca el cajón, ya sea "cajoneador" o "cajonero" porque ambos son de origen peruano, al igual que el cajón.
Dario Mejia
Melbourne, Australia
dariomejia999@yahoo.com.au

AL CESAR LO QUE ES DEL CESAR

Sr. Julio Olivera, encontre en su pagina web y la pagina que cito

LAS CALLECITAS DE LIMA ANTIGUA
“CIUDAD DE LOS REYES DEL PERU’
Por Julio R. Olivera Oré y Homero P.Pelaez Oré.
Presidente del Centro Cultura; Adalberto Oré Lara,
en el cual han hecho una copia fiel de los escritos del Sr. Dario Mejia, pero veo que omitieron poner el nombre del escritor del mismo.
Los articulos del Sr. Dario Mejia, estan expuestos en diferentes webs de la Internet, ya que el mencionado maestro en forma desinteresada, busca enseñar y difundir nuestras costumbres y tradiciones para el conocimiento de las nuevas generaciones. Usted ha hecho copia fiel de los articulos

- La Lima de mis Amores
- Los Pregones de Lima
- Curiosidades Limeñas
- Las Chapas en el Perú
- Las Musas de los Valses
- Jorge Bravo de Rueda
- El canto de amor al barrio


Los mismos que en muchos casos son anecdotas vividas por el Sr. Mejia.
Por este motivo creo que Usted deberia hacer una nota aclaratoria en su web, y poner los honores a quien en realidad se lo merece, la autoria es del Sr. Dario Mejia.
Esperando aclare este error, quedo de usted a sus ordenes en

AJISECOS Y CARAMELOS

Ajisecos y Carmelos

Hace unos días me llamó la atención el reclamo, en defensa de los animales, que hacían varias personas en un grupo cultural por el anuncio de una pelea de gallos en un pueblo del Perú y la representación del Yawar Fiesta en la Plaza de Acho. Lo curioso es que mientras en Perú se hacían estas actividades de sangre, con la venia de las autoridades, en Australia, donde vivo, salía al mismo tiempo la noticia de que en un suburbio de la zona oeste de la ciudad de Sydney habían arrestado a un hombre a quien le encontraron que en la granja de su casa tenía 170 gallos de pelea, estando 7 de ellos gravemente heridos. Lo más probable es que la corte haya determinado una pena de prisión para la persona aquella por crueldad hacia los animales y otros cargos más ya que la pelea de gallos está prohibida en Australia.

En los últimos tiempos, muchas personas han tomado conciencia de la protección que también se merecen los animales, con la finalidad de que no se les utilice como medio de diversión sangrienta y violenta. La mayor parte de los países desarrollados tiene leyes que protegen a los animales de ser tratados o utilizados en forma cruel, pero ello no significa que, en otras épocas, en esos países no se haya abusado de los animales ya que la violencia o ritos sangrientos con animales ha existido en casi todas las culturas a través del tiempo, habiéndose convertido en una costumbre de algunos pueblos que resulta difícil erradicar.

Hablar de gallos me hace recordar que de niño, con mis hermanos, teníamos una mascota en casa que era un pollito que después se convirtió en gallo. El mayor de mis hermanos, que fue quien le puso "chapa" a muchos en mi antiguo barrio, bautizó a nuestra mascota con el nombre de Raphael, en honor al gran cantante, aunque no sé si al cantante le hubiese gustado saber que le pusieron su nombre a un gallo. Todos los hermanos queríamos mucho a nuestro Raphael, pero el problema empezó cuando comenzó a hacer honor a su nombre de cantante, poniéndose a cantar de madrugada. Mi padre se amargaba porque el gallo no le dejaba dormir con su canto, así que decidió regalárselo a su hermana quien junto a mi tío, su esposo, tenían un gallinero en la azotea de su casa en el Rímac.

Los domingos ibamos a pasar el día donde mis tíos y lo primero que hacíamos con mis hermanos era ir a la azotea a visitar a Raphael. Un día, en que llegamos a pasar el día donde mis tíos, nos enteramos que mi tío había matado a Raphael porque peleaba mucho con otro gallo que había en el gallinero. Mis hermanos y yo estábamos tristes, pero lo peor llegó a la hora del almuerzo, cuando ya estábamos sentados en la mesa, mi tío nos dice que ibamos a almorzar a Raphael. Ninguno de mis hermanos quiso comer, así que mi tío se sacó la correa y nos amenazó de que si no comíamos nos iba a agarrar a correazos. Preferimos recibir unos cuantos correazos a tener que comer a quien había sido nuestra mascota de niños.

Volviendo a las peleas de gallos, la tradición, en general, es hermosa e identifica a un pueblo, por lo que se debe preservar la tradición. Pero, los tiempos cambian y con el avance en los medios de comunicación las personas se encuentran mejor informadas, habiéndose vuelto más responsables y humanizado ante su prójimo y los animales, dándose cuenta que, lamentablemente, hay tradiciones que son sangrientas y ello debe hacernos meditar al respecto.

Es indudable que la pelea de gallos está asentada en el Perú desde hace muchísimos años, siendo algo tradicional en algunos pueblos. Lima alberga una cantidad enorme de coliseos de gallos. En el interior del Perú también hay muchos de estos coliseos, lo que significa que hay un público para estas actividades y a ello se debe que ninguna autoridad se atreve a ponerle un coto a la pelea de gallos, porque hacerlo les quitaría votos.

La pelea de gallos existe en el Perú desde tiempos de la colonia. En sus inicios, por estar Lima rodeada de chacras y huertas, no había necesidad de contar con un local especial para realizar las peleas de gallos ya que se llevaban a cabo en cualquier chacra o huerta. José Gálvez señala que el primer coliseo de gallos que tuvo Lima estuvo ubicado en la Plazuela de Santa Catalina, habiendo sido construido por el catalán Juan de Garrial en 1762. Dicho coliseo tenía hasta viviendas en su interior.

Como las peleas de gallos tuvieron éxito, cuenta Gálvez, en 1790 se construyó un coliseo más grande en un solar de la calle del Mármol de Carvajal (actual segunda cuadra de la Avenida de la Emancipación). Dicha calle se llamaba Mármol de Carvajal porque en un solar de una de las esquinas de esa calle vivió Francisco de Carvajal, Maestre de Campo de Gonzalo Pizarro, a quien se le conocía más como el "Demonio de los Andes". Después de ser decapitado, junto con Gonzalo Pizarro, las autoridades decretaron que el solar que pertenecía a Carvajal sea derribado y sembrado de sal, colocándose en el lugar una lápida de mármol denigrándolo. A ello se debe que la calle se llamaba Mármol de Carvajal y dicha lápida de mármol permaneció en aquel lugar hasta el año de 1821.

El nuevo coliseo de gallos dio origen a que la calle del Mármol de Carvajal comenzara a ser llamada como calle de Gallos y así se le conocía durante el siglo XIX. Pero en dicho coliseo no sólo hubo pelea de gallos sino que también se organizaban allí otros espectáculos, como lo señala el periódico El Comercio en su edición del 6 de abril de 1841, donde relata sobre la actuación que tuvo allí un perro erudito, educado en París, quien jugaba a la baraja y el dominó, ponía su nombre, señalaba las horas, sumaba, restaba, multiplicaba y dividía. También, en la edición del 5 de setiembre de 1845, de El Comercio, se cuenta sobre la representación de la obra "Otelo" realizada en dicho coliseo de gallos por el famoso actor argentino Casacuberta y la actriz Emilia Hernández.

Carlos Prince señala que durante el siglo XIX la lidia de gallos en el coliseo de gallos, de la calle de Gallos, se anunciaba de manera ceremonial. Uno de los gallos era sacado en una jaula de lata que llevaba sobre la cabeza uno de la comitiva. Delante de la jaula iba un negro tocando la chirimia mientras que otra persona tocaba el tambor. El paso de la comitiva aquella era precedido por cohetes. De esta manera se llamaba la atención del público y se anunciaba que iba a realizarse una pelea de gallos.

Como en todo juego de apuesta, añade Prince, en la pelea de gallos abundaban las trampas, engaños y especulaciones, ya sea en la ligazón de la navaja, que la hacían floja; en la manera como se tomaba al gallo para echarlo al circo, estrujándole las entrañas o en las decisiones del juez, por tener interés en la pelea.

Con el crecimiento de Lima, el coliseo de la calle de gallos desapareció por estar ubicado muy al centro de la ciudad. El coliseo de gallos que adquirió fama en Lima durante el siglo XX fue el Coliseo de Gallos Sandia, que empezó a funcionar en 1918. Con el correr de los años, y al crecer la afición por la pelea de gallos, o crecer la afición por las apuestas, Lima se fue llenando de coliseos de gallos por varias zonas, al igual que el interior del país.

La literatura peruana se ha ocupado de las peleas de gallos. Una tradición admirable de Ricardo Palma, "El Conde de la Topada", cuenta una anécdota graciosa sobre una pelea de gallos que se llevó a cabo en la Plazuela de Cocharcas, de los Barrios Altos, el 8 de setiembre de 1819. El poeta Percy Gibson escribió unos versos hermosos en su poema "El Gallo". Al respecto, Luis Alberto Sánchez dijo: "Gibson no logró sobresalir por su tono rural, sino por el clamor bélico de 'El Gallo', composición muy celebrada".

Abraham Valdelomar dedicó su estupendo cuento "El Caballero Carmelo" a un gallo de pelea. Si muy bien Valdelomar describe en su cuento la pelea a la que fue sometido el gallo Carmelo, el mensaje que nuestro escritor trató de hacernos llegar fue más bien el del afecto y cariño que un gallo despertó en los miembros de una familia; los cuales se oponían a que se le haga pelear a muerte, con excepción del jefe de la familia aquella que por orgullo sacrificó al gallo de la familia. Valdelomar se adelantó a la época en que vivía ya que cuando escribe "El Caballero Carmelo", en la segunda década del siglo XX, la sociedad peruana de esos tiempos todavía no asimilaba bien el afecto y cariño que se merecen los animales, y que nuestro literato nos lo transmite con su hermoso cuento. Tal vez algún día la sociedad peruana, en general, se llegue a humanizar con los animales de la manera como Valdelomar nos hizo soñar con "El Caballero Carmelo" y que otras sociedades ya lo han asimilado.


Dario Mejia
Melbourne, Australia
dariomejia999@yahoo.com.au

NO RESPONDER A LAS BLASFEMIAS

. No responder a las blasfemias
Cuando somos insultados, provocados o acusados injustamente debemos responder con el silencio. Si respondemos de la misma forma cuando somos víctimas de la blasfemia, nos igualamos con aquellos que nos insultan, rebajando nuestro nivel. Si nos mantenemos en silencio usándolo como arma contra las blasfemias, evocando la conciencia de quien las pronunció, esta fuerza es, naturalmente, mayor.
2. Mantenerse calmo frente a los infortunios
Cuando nos encontramos con personas que nos quieren incomodar derrumbar u oprimir, debemos enfrentarlas con calma, evitando cualquier confrontación. No responder con un puñetazo cuando se recibe uno, ni responder con un puntapié cuando se recibe otro, pues de esta confrontación nadie sale vencedor. Si la intención es buscar venganza de un odio momentáneo, no alcanzará el éxito de grandes hazañas.
3. Compasión frente a la envidia y el odio
Frente a la envidia y el odio de otros no debemos responder igualmente con odio y envidia, sino con corazón abierto y alma compasiva, ofrecer nuestra amistad y mostrarles nuestra intención pacífica.
4. Gratitud frente a las difamaciones
Si alguien lo insulta y difama, no se enoje con quien lo provocó, sino acuérdese de los beneficios que esa persona le proporcionó en el pasado y sea agradecido por eso. Principalmente, no se olvide de que en el fango más inmundo crece la impecable flor de loto. Cuanto más oscuro es el lugar, mayor es la necesidad de mantener encendida la luz del alma. Por lo tanto, ante las difamaciones, aquellos que nos difaman deben ser influenciados con ética, compasión y misericordia.
El verdadero vencedor tiene la fuerza de la tolerancia y el coraje de asumirla frente a los insultos, opresiones

LOS REMEDIOS CASEROS

Los remedios caseros

Según la Encuesta Nacional de Hogares sobre condiciones de vida en el Perú, que es llevada a cabo por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) a nivel nacional y en forma continua desde mayo del 2003, en dicho mes de Mayo del 2003, el 65.1% de la población que no acudió a un centro de salud al presentar síntomas de enfermedad o accidente, fue debido a que no lo consideraron necesario o hicieron uso de remedios caseros. En mayo del 2004, dicho porcentaje se incrementó a 68.4% y en el mes de marzo del 2007 registró 63.2%, como figura en el último boletín disponible de dicha encuesta, en la página web del INEI.

Aquellos índices nos demuestran que, actualmente, un gran sector de la población peruana recurre a los remedios caseros cuando se encuentran enfermos. Pero los peruanos hacían uso de los remedios caseros, con mayor frecuencia, en tiempos antiguos, cuando el pueblo no estaba muy informado sobre la conveniencia y seguridad, para la salud, que representa el asistir a un centro de salud cuando la enfermedad toca nuestras puertas.

Los remedios caseros son una especie de tradición que hemos heredado, mayormente, de la abuela. Cuando alguien estaba delicado de salud en la familia, la abuela era la que recetaba lo que iba a sanar al enfermo, y por esa suerte, del destino muchas veces, solía acertar con lo que recetaba. Por ello siempre se escuchaba decir que "la receta de la abuela" lo sanó a uno.

En muchos pueblos del interior del Perú, cuando la receta de la abuela no da resultados, la gente suele acudir a los curanderos o brujos antes que ver a un médico titulado. Es que las creencias que existen en esos pueblos están tan arraigadas que los médicos, por más estudios que tengan, no logran convencer a los pobladores que ellos están verdaderamente capacitados para tratar las enfermedades.

Pero la manera como los curanderos curan de algunas enfermedades si que llama la atención. Según cuenta Alejandro Vivanco, las prácticas de odontología tradicional de algunas partes del sur del Perú son un poco curiosas: "Antes de que salga el sol, caminar descalzo contra la corriente de un río. En caso de gravedad, morder un diente de muerto con la muela enferma".

El método que se utiliza para curar el susto también varía en los pueblos. En Huanta, por ejemplo, señala Vivanco, cuando un niño tiene susto por una caída, la madre del niño agarra un gato o un perro y lo tumba varias veces en el lugar donde se cayó el niño. Como por arte de magia, el niño se sana pero el mal pasa al gato o perro que se utilizó. Debe haber mucho gato y perro asustado en la localidad de Huanta.

Desde tiempos de la colonia, la ciudad de Lima también ha tenido sus curanderos, los cuales gozaban de prestigio muy bien ganado ya que solían ser acertados con lo que recetaban. En la actual cuadra ocho del Jr. Antonio Miró Quesada vivía, antiguamente, un curandero apodado "Ño Siete Jeringas", quien debió gozar de mucha popularidad ya que su apodo fue el que le dio el nombre a dicha cuadra la cual se llamaba calle de Siete Jeringas.

Por mediados del siglo XIX, la ciudad de Lima tuvo una curandera muy famosa, Julia Retamoso, a quien la apodaron como la "Doctora del Cercado". Dicha curandera se especializaba en enfermedades mentales y nerviosas creyéndose una eminencia en la materia que hasta llegó a publicar un artículo en El Comercio, edición del 8 de noviembre de 1864, en el cual expuso como curaba ella de la alienación mental y la epilepsia.

Recuerdo que en mi antiguo barrio había una especie de curandero moderno a quien llamábamos "El doctorcito". El personaje aquel era muy solicitado ya que solía acertar con sus diagnósticos y recetas siendo el "médico" de la familia. Nunca supimos si realmente había estudiado algunos cursos de medicina o si era enfermero, pero, definitivamente, no era médico. Era una persona tranquila y callada, pero le gustaba el trago. Un día, cuando ya vivía en Australia, me enteré que el doctorcito había muerto en un accidente en la Av. Abancay quedándose mi antiguo barrio sin el personaje que curó a muchos por varios años.

Hace unos días en que me agarró una gripe fuerte, que hasta ahora no se me pasa del todo, lo primero que hice fue ir a ver un médico quien me recetó antibióticos para la garganta que me dolía mucho. Siguiendo las indicaciones del médico, me quedé descansando en cama, así que dos días no fui a trabajar. Pero como yo no puedo estar tranquilo, menos en la cama, me puse a escribir sobre diferentes temas que hasta un amigo me sugirió que me enferme más seguido. Otras amistades, preocupándose por mi estado de salud, me hicieron llegar las recetas de algunos remedios caseros para que me sane de la gripe y la garganta.

Una amiga me hizo llegar una receta, se supone de su abuela, a base de ajo, para que me alivie la garganta. Seguí la receta aquella y, efectivamente, me mejoró de la garganta. Pero, cuando me fui a trabajar y subí al tren, el olor del ajo hizo que la gente que estaba en aquel vagón del tren se bajara apurada en la siguiente estación.

Como estaba con la nariz muy congestionada por los efectos de la gripe, otra amiga me recomendó unos baños de vapor de Mentholatum. Así que en una batea con agua hirviendo eché Mentholatum, como me lo recomendaron, y cubriendo mi cabeza con una toalla puse mi rostro cerca de la batea para que el vapor con Mentholatum penetrara por mi nariz. Sentí que mi nariz se descongestionaba, por lo cual me vinieron bellos pensamientos hacia mi amiga por la efectividad de su receta; pero mi amiga no me dijo cuanto tiempo debía hacerme ese baño de vapor, así que al final terminé con la cara toda roja con síntomas de quemaduras.

Lo más interesante fue el remedio casero que desde Puente Piedra me hizo llegar un gran conocedor de nuestras costumbres y tradiciones. El amigo aquel me dijo que para curar la gripe lo mejor era un buen Pisco con su limón o el caliche serrano: un mate de hierbaluisa y canela con sus buenos tragos de aguardiente de caña.

Cuando iba a empezar a poner en práctica aquella excelente receta casera para combatir la gripe, se me vino a la memoria de que cuando era niño y me enfermaba, se me iba el apetito. Pero como dicen que enfermo que come no muere, mi madre se las ingeniaba para hacerme comer, así que acercando una cucharada de sopa a mi boca me decía que tome esa cucharada por la abuelita. Luego me daba otra cucharada de sopa y me pedía que la tome por el abuelito. Así por el estilo, tomaba una cucharada de sopa por cada miembro de mi familia, que es numerosa, y sin darme cuenta me terminaba la sopa.

Con un par de botellas de Pisco en la mano, empecé a tomar una copa, primero, por mi mamá, luego otra copita por mi papá y otras más por cada uno de mis hermanos. Me acordé de un lejano y pasado amor y también me tomé una copita por ella. También tomé por cada uno de mis amigos y ya no recuerdo por quien más tomé. No me sané de la gripe... pero... les puedo asegurar que la borrachera que me di fue de Padre y Señor mío.


Dario Mejia
Melbourne, Australia
dariomejia999@yahoo.com.au

LA MUSICA CRIOLLA NO HA MUERTO

¡ La Música Criolla no ha muerto !

¡ Vive en cada uno de nosostros, quienes la cultivamos y la llevamos adelante día a día para que las nuevas generaciones la conozcan ! Yo no me considero ningun privilegiado, ni famosos, ni elegido por nadie, para poder calificar las acciones o proyectos del señor Jaime Cuadra, a quien no conozco y a quien no he escuchado de su producción musical, pero es cierto que si él se considera "rockero", pues adelante, que siga con sus proyectos dentro del rock peruano o internacional que más le guste, o como a mejor le guste llamarlo el tipo de música que sabe hacer.

Yo no puedo entender con meridiana claridad, cómo una artista peruana de la talla internacional de Doña Eva Ayllón, supuestamente reconocida como la mejor representante internacional de la música criolla peruana, se está prestando a cambiar el "estilo del vals peruano" y convertirlo en "ROCK - VALS" o como lo quieran mejor llamar...

Indudablemente, no estoy criticando a Doña Eva Ayllón, no me considero capaz de ensuciar su carrera profesional, personalmente, la respeto y la admiro, aunque no haya tenido el gusto de conocerla personalmente ni tratarla, pero desde el fondo de mi corazón criollo, la valoro como artista en todo el sentido de la palabra, espero con mucha ilusión, que esto de "mezclar los ritmos" como lo hacen los músicos mexicanos, que inventan cada cosa nueva del gusto de ellos... no llegue a la música criolla peruana, porque sería una tristeza que no puedan encontrar nuevas canciones, en otros compositores para poder "des-inmortalizar" temas como "el plebeyo" en otro ritmo que no se sabe si vaya a gustar, o halla sido concebido tan versatilmente por su autor... de pronto mi reacción pueda ser entendida como "hepática", pero creo que: "...todos merecen el respeto de ser como son..."... y... "cantar como quieran cantar...", ..." en el ritmo que les guste cantar...", siempre y cuando el autor de la letra y la música se lo otorgue libre y voluntariamente,... pero creo que nadie tiene el derecho de destruir la "obra del bardo inmortal - Felipe Pinglo", por mucha "fusión" que haya llegado a la música contemporánea moderna... y muchos músicos quieran innovarse y modernizarse....

Sólo falta intentar cantar "Todos Vuelven" en ritmo de "reggaeton" para que los niños y jóvenes de hoy, "puedan conocer la letra de una canción"..., pero tambien a la vez sería negar el espíritu nétamente criollo de Don César Miró, cuando él con todo su corazón y sentimiento plasmó las letras de este lindo vals, que se valora y se aprecia en la extensión de la palabra, más en el extranjero, que en nuestra propia patria que nos vió nacer.... él que nunca salió de Lima y de las fronteras peruanas, no sabe lo que es sentir y escuchar cantar el vals "todos vuelven" en otra parte del mundo... la emoción que se vive, el anhelo de patria que se añora, el recuerdo de todos los amigos y familiares, los que quedaron atras, y muchas confusas sensaciones que se generan hasta lograr arrancar las lágrimas desde lo más profundo del corazón....

NO sé cual sería la opinión de mi amigo y maestro Rolando Gómez "El Chama", (quien partiera al descando eterno el 15 de julio del 2006), que luego de llevar a la fama internacional el vals de Chabuca Granda "La Flor de la Canela", ahora alguien con con una falsa "creatividad", desconocimiento total o parcial, "poco respeto" por la historia y la tradición de muchos criollos que lucharon por derrotar las tendencias musicales extranjerizantes del momento (y yo me incluyo entre los criollos) pueda ver que alguien desconocido, destruye inexorablemente la obra que a él y a su "Trio Los Chamas" famoso (por más de 30 Long plays grabados de los verdaderos autores de la historia criolla peruana), les costó llevarlo en los 50's - 60's por America, Europa y Asia....

¿Falta de identidad criolla?.. por qué no se les ocurre por ejemplo llevar cualquiera de los tangos argentinos del inmortal Gardel y los hacen "fusion", seguramente los argentinos no lo permitirian, porque son casi himnos para ellos...

¿Qué dirían los chilenos de llevar las cuecas chilenas al rock por darle una humorada, o espacio, o presencia musical, o como lo quieran llamar, a nuestros músicos peruanos?; seguramente que su consulado haría una declaración internacional de rechazo, por la violación de su patrimonio cultural...

Oh!!!!!!!!! se me ocurre algo más interesante....

Preguntémosle a la Sra. Ima Sumac, la voz más potente, educada y colorida del Perú, si tal vez a ella le gustaría cantar "El Cóndor Pasa" o "Vírgenes del Sol" en ritmo de rock... ¡ Esto está totalmente fuera de lugar !

O... tal vez... preguntarle a Doña Victoria Santa Cruz, famosa folklorista peruana, de fama internacional, si a su hermano Don Nicomendes, le gustaría llevar el tema "Callejón de un solo Caño" al ritmo de Rock????... o cambiar la historia de los negros en el Perú, o cambiar sus ritmos afro-peruanos????

Seguramente ella se opondría con mucha entereza y lo calificaría de "inaceptable" en su calidad internacional de maestra.

O tal vez a Doña Serafina Quinteras si le gustaría ver cómo su tema "Muñeca Rota" se hace "fusión" con el rock peruano... eso tal vez le gustaría a mi hijo de 12 años, quien no conoce por su corta edad, toda la historia criolla... esto resulta humillante para mí, como padre criollo!!!!

O tal vez al estilo satírico, bien hablado y elegante del comunicador social y escritor peruano Don Jaime Baily, lo sacaramos a Don Hugo Chávez, (presidente-dictador de Venezuela)... cantando un engendro musical denomimado "joropo - vals peruano- rock bolivariano"..

¡ Como pueden ver, no sólo tengo ideas musicales, sino que tambien se me ocurren calificarlas (aunque me resulte de mal gusto a mí mismo) de "totalmente desastrozas"...!!!!!!!!!

Tal vez yo no sea el músico, intérprete o cantante indicado para criticar a nadie, tal vez esto sea una discusión sin fin, y no logro entender porque los calificados por todos como "entendidos", no se manifiestan al respecto... pero la controversia ya existe...y "espero que la sangre no llegue al ríio"....

¿Quieren hacer música?...háganla!!!!

¿Quieren nuevas letras?, pídanselas a los antiguos y nuevos compositores que se las hagan explícitamente para sus gustos (al mejor estilo del Chavo del 8... si es que a ellos "les simpatiza"...)

¿Quieren salir al mercado con nuevas producciones de discos?... luchen por hacerlo con identidad propia, no destrozando vilmente lo que otros hicieron con mucho esfuerzo !

¿Quieren romper la historia de la cultura criolla?, lo siento.... allí me tendrán presente, para poder decirles que no están autorizados por todos los criollos, por el respeto que nos merecen los autores criollos, y personalmente mi abuelo materno, mis padres y toda la obra que se viene desarrollando en páginas amigas de internet como lo son:

www.perumagiayencanto.com,
www.criollosperuanos.com,
www.losperuanos.com,
www.boletindenewyork.com

y otros amigos en Australia, Italia, Venezuela, Holanda, que luchan por llevar nuestra cultura, preservar nuestra música criolla, identificar nuestra raza de peruanos criollos, nuestra identidad musical de grupo, nuestra sangre peruana roja y blanca a través de las tenues distancias de la internet...

Espero que los autores criollos reconocidos como Don Augusto Polo Campos, Don Alejandro Lara, Don Jose Escajadillo Farro, (por mencionar algunos de los más importantes y a quienes admiro profundamente por su versatilidad y legitimidad criolla), recapaciten profundamente, opinen valerosamente y no se olviden de lo que les costó llevar sus famosos valses al mundo y hacer a través de estos valses de su inspiración, famosos a muchos artistas como a Don Arturo "Zambo" Cavero y muchísimos otros, que siguen llegando con orgullo, a toda la comunidad peruana dispersa en el Perú y alrededor del mundo. con la única alegría de verlos (a los artistas) aunque sea una o dos horas en un show presentado por empresarios(algunas veces extranjeros) que sí valoran la música criolla peruana...

Señor Jaime Cuadra, no tengo el gusto de conocerlo, pero aun así, lo felicito por su voluntad e salir adelante, por su esfuerzo de permanecer vigente en la música, por sus ganas de difundir lo nuestro, y humildemente desde esta parte del mundo, le sugiero que busque otros temas, o genere temas nuevos creados explícitamente para Usted, para plasmarlos en su nueva producción musical de su nueva fusión musical, que sean de su identidad propia, para que así se lo reconozcan las generaciones de peruanos alrededor del mundo.

Y le pido disculpas por atreverme a escribirle mis pensamientos y sentimientos libremente, porque me parece que usted tiene una opinión muy valiosa, y no quisiera limitar su creatividad, pero le manifiesto asimismo, que no la comparto con Usted y no la puedo aceptar por intervenir en asuntos de criollos no siendo Usted identificado plenamente y musicalmente como Criollo.

A la mejor manera del Profesor Carlos Chinchayan le recuerdo que: "Nadie Ama Lo que no conoce" y me parece que usted no conoce el criollismo a fondo y tal vez quiere tratar de arraigar la idea de que "el criollismo está muerto". Es un error de muchos por desconocimiento, y discúlpeme otra vez, no es mi intención ofenderlo, ni disminuirlo en lo más mínimo de toda su calidad artística y de su capacidad de interpretación musical.

Desde The Hammocks, MIami, Florida

Yvan Espinoza
Proyección Criolla