sábado, abril 28, 2007

Sobre la cancion ALDEANA

Felipe Pinglo compuso su vals "Aldeana" el 12 de mayo de 1935. Pinglo ya se encontraba delicado de salud, sin embargo seguía componiendo y al mes siguiente "Los Trovadores Porteños" estrenan una nueva obra de Pinglo, el one step "La canción del porvenir". En agosto compone su vals "El inclusero" y en setiembre nos entrega "El espejo de mi vida", estrenado por Alcides Carreño en el Teatro Apolo el 14 de setiembre de 1935.

La enfermedad de Pinglo se acrecienta, pero él también sigue creciendo como compositor y en octubre de 1935 da a conocer su vals "Pecadora". En noviembre del mismo año compone su vals "La que fue" y para cerrar el año aquel, el 30 de diciembre de 1935, compone la polca "Los tres ases" para homenajear el trío posterior que jugó por el Alianza Lima en su gira triunfal por Chile. Cabe mencionar que uno de los homenajeados con esa polca fue Arturo Fernández, jugador de la "U", quien junto con su hermano "Lolo", ídolo crema, reforzaron al Alianza Lima en esa gira.

Sumado a ello, Pinglo nos entregó, durante ese año de 1935, el vals "Bohemia de luto", que se conoce también como "A la memoria de Carlos Saco". Dicho vals es un homenaje al gran compositor Carlos Saco, amigo de Pinglo, quien falleció el 18 de febrero de 1935 como consecuencia de una pulmonía doble que le dio dos días antes al retornar, de madrugada, de una fiesta a la que había asistido con su bohemio grupo de Cocharcas: Angel Monteverde, Victor Echegaray, Pancho Estrada, Carlos Bahamonde, Alejandro Ascoy y otros. Pinglo debe haber compuesto ese vals para Carlos Saco días después de su muerte, en el mes de febrero, ya que en dicho vals describe como fue el cortejo fúnebre.

La grandeza de Pinglo, para crear excelentes obras, también queda demostrada en ese año de 1935 cuando compone su vals "Sueños de opio" y otras obras más que se han perdido por no haberse recopilado a tiempo. Felipe Pinglo seguiría componiendo en 1936, año de su lamentable fallecimiento.

Aldeana
(Vals Peruano)
Felipe Pinglo

En la apacible quietud de la aldea,
donde la vida es un himno de paz,
eres el hada grácil y ligera,
que a su paso esparce la felicidad.

En la visión definida y serena,
del que juzga el mundo cual fuente del mal,
eres, aldeana, lo que mi alma espera,
eres la belleza llena de humildad.

La aurora, que trae el eterno mañana,
al enviar sus rayos, alumbra tu ser;
alzas el rostro a dar gracias al cielo
y entonces te muestras divina, mujer.

Sus rayos de plata con tintes de perla,
a tu faz circundan, cual un medallón,
y en aquel instante muestras la pureza
de un ángel terreno mimado de Dios.

Los seres tan puros siempre en su alma llevan,
nobles sentimientos, ternura y bondad,
que amables prodigan, cual bálsamo eterno,
a quien necesita remedio a su mal.

Yo soy un rebelde de esa gran mentira
que llamamos vida y la muerte da,
aldeanita hermosa, graciosa y tan bella,
la dicha que ansío, tu amor me dará.

(Aparecido en "El Cancionero de Lima" No. 1612)

Dario Mejia
Melbourne Australia

sábado, abril 14, 2007

Sobre El reto del Agua

Has tocado un tema de suma importancia para la humanidad y uno al cual le debemos de dedicar atencion y como bien lo dice tu mensaje: "es valido para todo el mundo" y permiteme, agregar que tenemos que cambiar o adecuar nuestras vidas para tener presente el ahorro de este elemento que nos lo da gratis Dios.

Preguntemonos: Somos nosotros los seres humanos, los generosos desperdiciadores de Dones y Destructores de todo lo que hemos heredado de Dios y de nuestros antepasados.

Debemos unirnos a esta invitacion que nos haces, seguir los buenos consejos que presenta tu archivo de powerpoint, y compartir, algunos consejos para no desperdiciar y consumir este elemento de la naturaleza tan preciado.

Sabes, me gusta la jardineria y en mis ratos de descanso alrededor de mis amigas las plantas, les entrego el agua lluvia que con poco esfuerzo recolecto en diferentes recipientes, colocados en lugares estrategicos alrededor de mi casa para asi utilizar el agua y mezclarla con alimento nutritivo para mis plantas. Siempre alrededor de la casa encontramos recipientes que no utilizamos y asi un dia me di a la tarea de ver que pasaba y cachuflin, cachuflan, un buen poco de agua mis recipientes me ofreceran.

Cuando vayas de campamento, lleva algunos de estos recipientes, para recolectar el agua lluvia, porque podria salvarte la vida, dependiendo en donde te encuentres, o sino para lavar un buen par de medias y que su aroma no auyente a la poblacion silvestre y poder gozar de la presencia de conejos, ardillas, venados, etc...

En fin existen muchas y maneras de cuidar el agua, imaginate, solo si fuera bien utilizada, cuando el avion aterriza en nuestro famoso aeropuerto Jorge Chavez, nuestra vista se concentraria en lo verde y arreglado del ambiente y no veriamos los techos de las viviendas de esa zona, y todos los gobiernos dicen que no hay dinero para ayudar a los ciudadanos peruanos para arreglar esta situacion, ...me halo las barbas...mientras que los politicos pongan a remojar las suyas.
Imaginense, verdecitos, para darle mas color a nuestro querido litoral costeño. Uno de mis predilectos lugares de infancia y donde muchas de las huellas que deje se las llevo el viento y solo ahora viven en lo profundo de mi memoria para saborear personalmente de esos recuerdos y compartirlos con mi nietecita, Elisa, y ahora me place con Uds.

Como muchos peruanos de nuestros lugares preferidos en el Peru, saboreamos el agua a lo largo de nuestro pais, y hasta el agua saladita de nuestras playas, mientras veiamos volar las gaviotas, creo que ahora hay solo algunas, ya se las comieron las pandillitas de piranitas que viven a lo largo de las areas rocosas de nuestro litoral limeño. Ademas, los pescadores ya no hacen sus paseos a la Isla San Lorenzo a pescar o traer guano, para venderlo a los agricultores, tal vez ahora que presenciamos las extensas cantidades de sacos de harina de pescado que en realidad es anchoveta peruana, eso si da sed.

Recuerdo alla por mediados de los años 50, cuando mi padre compro un buen pedazo de tierra que en esa epoca eran los algodonales de Chancay...llenos de piedras que toda la familia limpiamos poco a poco. Ahora es parte de la historia de la familia y entiendo que un chino tiene en la cima del cerro un oasis con el agua que compro del terreno que perdimos hace decadas. Como yo parti del Peru en el año 1964, no vivi los detalles para seguirles contando lo que sucedio, pero recuerdo que, casi todos los fines de semana y parte de mis vacaciones, en mi infancia y parte de mi juventud, los pase alla entre, Chancay, Huaral, Huacho y las grandes y preciosas pampas de nuestra costa, que en la primavera, se vestian de amancaes decorando la arena de colores, mientras jugabamos como gaviotas a la orialla del mar y recogiamos amancaes para llevar a casa. Todo era arena calientita y las muchas siestas y caminatas que mi existencia gozo con mis 17 perros, pudimos compenetrar con nuestro suelo y gozar de el. Podia ver a las lechuzas y admirarlas como podian vivir en agujeros que hacian en los cerros y de vez en cuando con mi hermano decidiamos buscar alacranes, solo haciamos unos huecos y, cachuflin, salian. Es interesante convivir con perros, lechuzas y alacranes.

Has tomado; rodeado de tus perros sobre la arena de nuestra costa; una sabrosa siestecita, mientras el viento, bañando tu cuerpo, se estira a sus anchas ?

Bueno, corriamos porque despues de una buena siesta, le da sed a uno, y teniamos que regresar sedientos, corriendo cerro abajo, al llegar a la casa donde nos esperaba una sabrosa jarra de agua de las entrañas de nuestra madre patria. Teniamos agua, y de la mas sabrosas, referscante y exquisita, porque mi padre compro una bomba, que mi hermano, Carlos, instalo. Por muchos años gozamos de esa agua y se que despues unos chinos tambien gozaron de ella y ahora dicen que unos españoles han comprado esa tierra, y no se que haran ?

Teniamos agua hasta para regar los arboles frutales de la huerta de mi madre, que dicho de paso es Chilena y sabe gozar del buen trabajo y la cancion. Siempre nos cantaba valcesitos criollos y canciones Chilenas y hasta hoy ya en sus 85 años, nos da excelentes consejos, y mensajes de amor. Su Reina y a la persona que siempre le guarda una gran admiracion y respeto es a nuestra joya y valor criollo: La Sra. Jesus Vasquez, "La Reina de La Cancion Criolla". Todo mi familia somos sus subditos y nunca habra nadie que se le iguale, aunque muchas tratan. La Sra. Jesus Vasquez siempre nos regala lo mejor que Dios siempre le dio, Su Amor, por nuestra Musica Criolla y la pasion de hacernosla sentir. Siempre vivira en los corazones de todo peruano que sabe respetar lo nuestro y a los seres humanos, y se escucharan sus dulces interpretaciones, como jilgeros matutinos para darnos los buenos dias y desearnos lo mejor de ellos.

En realidad en muchos corazones de familias peruanas vive y vibran con energia esos momentos de sus primeras presentaciones y aunque muchos traten de emularla cantando las mismas canciones solo nuestra "Reina de la Cancion Criolla", La Sra. Jesus Vasquez las sabe cantar con Amor...

Que rica que sabe el agua cuando se tiene sed...

Aguita, que seria sin ti
Autor: Leoncio F. Espinoza

Vida pasajera, hermosa, alegre,
bondadosa, traicionera, pensandote,
Que seria de mi, sin tu presencia,
mi amada, agradable, saciable amiga.

Sin ti, vida existiria ?, limitando alegrias
sintiendo tu ausencia, perdido, confundido,
angustiado, desesperado en brazos del olvido,
pensando a que sabria mi Pisco y mi Chelita.

Prisionero, en desesperacion, añorando tu regreso
mis labios, partidos por no tenerte, sin saborear,
tu ser refrescante, saciando mi existencia, devolviendome,
Destellos de Luz, Energia, Alegria, Vivir Nuevamente...

-------------04102007--------------

La vida es comica y una tombola, tom, tom, tombola........mientras escribia estas lineas y llegaba al final del poemita dedicado al aguita, el locutor comento como parte de las noticias, la ciencia del uso de agua en la taza del baño, y decia, como en ciertas ciudades ya el agua no se da como antes, muchos andan preocupados y para tratar de aminorar este problema, la cia. Kohler, va a lanzar al mercado una taza de capacidad de 1.3 galones de agua. Esto representaria un gran ahorro, ya que hoy existen tazas de 1.6 o mas galones de capacidad de agua. Tambien se menciono que costaria unos $50.00 dolares mas que una taza de 1.6 galones, pero a la larga la inversion se recobraria y se ahorraria mas agua. Asi, tambien el presidente de Argentina entra en el sancocho, porque le decia a su pueblo: Basta,....Basta....YA...no creo que se referia al desperdicio de agua, pero son buenas palabras para empezar a reducir y preservar nuestra valiosa AGUA !!!! He Dicho !!!

Saludos

Leoncio F. Espinoza Ceroni
"Entre los maizales de Iowa" VEPC

Pinglo y los Barrios Altos

Pinglo y los Barrios Altos

Felipe Pinglo, el bardo inmortal, estaba viviendo los momentos más dramáticos de su vida durante los primeros días del mes de mayo de 1936. Se encontraba postrado en la cama de su casa de la Calle Penitencia en los Barrios Altos de Lima y, enfermo como se hallaba, logró terminar su última composición que estaba dedicada a su esposa Hermelinda Rivera, el vals "Hermelinda" que lo terminó el 6 de mayo de 1936. Durante esos últimos días, Pinglo logró recuperar la guitarra con la cual compuso las notas musicales de su primer vals, "Amelia", y muchas de sus grandes creaciones, la cual había desaparecido durante una noche de jarana sin que sepa más de ella por varios años. Quien una vez se llevó la guitara de Pinglo la dejó en un rincón de la casa que paraba llena de sus amistades que estaban acompañándolo en sus últimos días de vida. Con ella, otra vez en sus manos, Pinglo pudo terminar las notas de su último vals.Muchas cosas deben haber pasado por la mente de Pinglo en aquellos últimos días. Su mente debe haber viajado por los rincones de su barrio querido, Barrios Altos. Barrio que lo vio nacer y donde vivió toda su vida, con excepción de una corta temporada en que se fue a vivir a La Victoria, pero al regresar al barrio de sus amores compone uno de los mejores cantos de amor al barrio, su vals "De vuelta al barrio".En cierta forma, la vida de nuestro bardo inmortal está ligada a la historia de las calles de Barrios Altos, porque todos sus biógrafos, cuando mencionan las calles por donde transcurrió la vida de Pinglo, señalan la denominación antigua que tenía la ciudad de Lima y no la actual, que para la gran mayoría es desconocida tanto en nombre como en historia: Colegio Real, Buena Muerte, El Prado, Maravillas, Mercedarias, Naranjos, Penitencia, Rufas, San Ildefonso, Trinitarias, etc.Felipe Pinglo nació el 18 de julio de 1899 en la Calle del Prado No. 500. Dicha calle es lo que actualmente comprende a la cuadra 13 y parte de la 14 del Jr. Junín, Barrios Altos. En la actual cuadra 14 del Jr. Junín nació Felipe Pinglo (Jr. Junín 1456), frente al Convento Nuestra Señora del Prado. Sin embargo, cuando en 1861 se decide cambiar la antigua denominación de las calles de Lima y adoptar la nomenclatura que tenemos hasta nuestros días, dicha calle no se llamaba como "Calle del Prado" sino que se llamaba "Mascarón del Prado". Debido a que existían ya otras calles que llevaban ese nombre de Mascarón (Calle del Mascarón se llamaban dos calles, la que es la actual quinta cuadra del Jr. Cusco y también la que es la actual séptima cuadra del Jr. Maynas), que podía confundir a la gente, la empezaron a llamar, solamente, como "Calle del Prado".La Calle del Prado (Mascarón del Prado) debe su nombre al Convento Nuestra Señora del Prado que queda en dicha calle y que fue fundado como Monasterio del Prado por el Arzobispo Villagómez el 1 de setiembre de 1640.Contigua a dicha calle esta la "Calle de Cinco Esquinas" que viene a ser lo que actualmente es la parte final de la cuadra 14 del Jr. Junín (la cuadra 14 del Jr. Junín comprende parte de la Calle del Prado y a la Calle de Cinco Esquinas). Cinco Esquinas debe su nombre a que desde la época de la colonia son cinco las calles que se interceptan al final de lo que actualmente es la cuadra 14 del Jr. Junín: Calle de los Naranjos, Calle Barbones, Calle Ancha (actual cuadra 15 del Jr. Antonio Miró Quesada), Calle Sequión (llamada también Calle del Acequión, era una calle extensa que comprende a las actuales seis cuadras de la Calle Huari) y Calle de Cinco Esquinas.Felipe Pinglo realizó sus primeros estudios, el jardín, en una escuelita en la "Calle Barbones". Dicha calle es lo que en la actualidad viene a ser la cuadra 15 del Jr. Junín y está llena de historia ya que daba a la Portada de Barbones de la antigua Muralla de Lima. Tanto la Portada de Barbones como la de Maravillas vieron desfilar a las tropas del ejército en su ida y venida del centro y sur del país, especialmente durante las batallas por la independencia y la Guerra del Pacífico.La Calle Barbones debe su nombre a que allí, a finales del siglo XVII, se levantó el Convento de Betlemitas que pertenecía a la congregación de betlemitas que llegó, de Guatemala, al Perú en 1671 y que al ser elevados a Orden Religiosa por el Papa Inocencio XI, por bula del 26 de marzo de 1687, deciden construir su convento en Lima. Pero dicho convento fue conocido por el pueblo, desde su inicio, como "Convento de Barbones" ya que a los padres de dicha orden religiosa se les conocía como "Padres Barbones". Según las reglas de la orden de los betlemitas, les estaba prohibido afeitarse.La primaria, Pinglo, la estudió en la Escuela Fiscal de los Naranjos en la "Calle de los Naranjos". Dicha calle era larga y está localizada entre el actual Jr. Huánuco y el cruce de Cinco Esquinas, comprendiendo a las actuales cuadras 12, 13 y 14 del Jr. Antonio Miró Quesada. Debe su nombre a la Capilla de los Naranjos que se fundó en esa zona en 1750.Para ir a su escuela, Pinglo, desde El Prado, debe haber subido hasta el cruce de Cinco Esquinas y de allí doblado a los Naranjos. También cabe la posibilidad de que haya bajado hasta la "Calle Manuel Morales" que conecta con los Naranjos. Dicha calle, Manuel Morales, no existía en 1861, cuando se adoptó la actual nomenclatura que tienen las calles de Lima. Debe haberse abierto a finales del siglo XIX y por ello su nombre no tenía nada que ver con la tradición con la cual el pueblo limeño solía bautizar a sus calles. El gobierno local le puso ese nombre en homenaje al Doctor Manuel Morales, quien fue Ministro de Relaciones Exteriores en dos ocasiones, 1859 y 1878.La Calle Manuel Morales, actualmente llamada Matías Maestro, es una calle que conecta el Jr. Junín con el Jr. Antonio Miró Quesada y está, subiendo de la Iglesia del Carmen, al final de la cuadra 11 del Jr. Junín, a su mano derecha. Allí quedaba el antiguo Teatro Lima que pasó a ser cine y después un templo evangelista. Pinglo debe haber visitado muchas veces el Teatro Lima de donde se sabe que se organizó allí, el 8 de mayo de 1926, un festival a beneficio del músico Nicolás Wetzell contándose con la participación de Felipe Pinglo, el dúo Montes y Manrique, los hermanos Vilela, Carlos Saco, Guillermo Acosta, Juan Araujo y otras figuras más del criollismo de la época aquella.En el número 114 de la Calle Manuel Morales, vivió y murió Alejandro Ayarza "Karamanduca". También vivió allí, sus últimos años, Abelardo Gamarra "El Tunante", quien vivió en el No. 109.Menciono que Abelardo Gamarra vivió sus últimos años en la Calle Manuel Morales porque allí falleció, el 9 de julio de 1924, y también debido a que encontré en el semanario Integridad, que dirigía Abelardo Gamara, un aviso en su edición del 22 de mayo de 1909 que decía: "Abelardo Gamarra se ha trasladado del Barranco a Lima, Calle de Mapiri número 123". La Calle de Mapiri era el nombre anterior que tenía el actual Jr. Miguel Aljovin y su primera cuadra es el costado del Palacio de Justicia. El nombre antiguo de dicha calle, antes de 1861, era "Calle San Juan Nepomuceno" y muy cerca de allí estaba la Muralla de Lima con su Portada de Guadalupe. No existía en ese entonces (1861) el actual Palacio de Justicia. Pero, como ironía de la vida y quizás de la tradición, San Juan Nepomuceno es conocido como "El Mártir del secreto de confesión" y, años más tarde, en esa calle se construiría el Palacio de Justicia donde los que llegan allí tienen que dejar los secretos a un lado y confesar sus pecados en forma pública. Me salí de los Barrios Altos con esta pequeña historia, pero creo que valió la pena.Uno de los clubes para los cuales Felipe Pinglo jugó fútbol fue el "Alfonso Ugarte" que quedaba en la "Calle de San Ildefonso". Dicha calle es una cuadra grande que viene a ser actualmente, en numeración, la primera y segunda cuadra del Jr. Andahuaylas. En dicha calle vivió el General Andrés Avelino Cáceres. Yo nací a la vuelta, en la "Calle Tigre", primera cuadra del actual Jr. Ayacucho, pero acudía, a diario, al Mercado de San Ildefonso y a una panadería que había en esa calle, la cual preparaba los mejores y más deliciosos panes franceses que haya probado en mi vida.Volviendo al nombre de la calle, debe su nombre a que allí quedaba el Convento de San Ildefonso, el cual fue destruído a fines del siglo XVIII o inicios del XIX (En unas estadísticas de Lima de 1839, ya se mencionaba que estaba destruído). Dicho convento fue inicialmente un colegio, para estudio de los religiosos de la orden de San Ildefonso, que se fundó en 1606 como Colegio de San Ildefonso. Mediante bula del 13 de octubre de 1608, expedida por el Papa Paulo V, se acordó que dicho colegio pasaría a denominarse Colegio y Universidad Pontificia de San Ildefonso. Después, ampliaron el área que abarcaba y pasó a convertirse en Convento de San Ildefonso. La parte del Convento ya no existe, pero queda todavía en pie la parte que se utilizaba como el Colegio de San Ildefonso y que ahora viene a ser la Escuela Nacional de Bellas Artes.Debe mencionarse también de que el club Alfonso Ugarte solía entrenar y jugar en las canchitas de Martinete que estaba muy cerca de San Ildefonso, por lo que Pinglo debe haber jugado en esas canchitas donde años más tarde jugaban sólo los valientes y que hasta ahora existen en el actual Jr. Amazonas, que también tiene su historia por lo que nombraré algunas de sus calles antiguas que, infinidad de veces, recorrí de niño y adolescente, donde también antiguamente se encontraba una de las Portadas de la Muralla de Lima.Como no existía, antiguamente, la primera cuadra de la Av. Abancay, el Convento de San Francisco llegaba hasta el actual Jr. Ayacucho. La parte que corresponde al actual Jr. Amazonas entre la actual Av. Abancay y el Jr. Ayacucho, que viene a ser la segunda cuadra del Jr. Amazonas, se llamaba "Calle Barranca". Su nombre se debe a que muy cerca, donde ahora se encuentra una feria de libros, estaba una zona conocida como "La Barranca", por encontrarse a varios metros de altura sobre el nivel del río, y donde a mediados del siglo XVIII se construyeron allí varios callejones que serían los "modelos" que tomaron los que se levantarían después en Lima.La "Calle Viterbo" era la que actualmente es la tercera cuadra del Jr. Amazonas. Luego empieza la zona aquella conocida como "La Barranca", en su actual intercepción con el Jr. Andahuaylas (Calle de San Ildefonso), por lo que dicha calle tenía el nombre de "Calle Barranqueta" y viene a ser la actual cuarta cuadra del Jr. Amazonas. En su esquina, donde empieza la Feria de Libros actual, se construiría el Puente Balta a inicios del siglo XX y, en esa misma esquina, estaba uno de los cines más antiguos de Lima, el "Cinelandia", donde, por su cercanía al río Rímac, las ratas desfilaban en el intermedio. Dicho cine fue destruído en la década del 70 del siglo XX.Sigue la "Calle las Carrozas" que viene a ser lo que actualmente es, en numeración, la primera parte de la cuadra 5 del Jr. Amazonas, entre el actual Jr. Paruro y el Jr. Huanta. Muchos se extrañarán al ver el nombre de "Las Carrozas" en el Jr. Amazonas y no en la primera cuadra del Jr. Huánuco, como se conoce actualmente. Según las estadísticas y planos de Lima del siglo XIX, la "Calle las Carrozas" era la que he mencionado en el actual Jr. Amazonas y la primera cuadra del Jr. Huánuco se llamaba "Calle Sauces". Pero hay que tener presente que era el pueblo quien muchas veces, sin ceremonias ni decretos, bautizó a muchas calles por algún hecho curioso que haya ocurrido en ellas y fue el pueblo el que, años más tarde, decidió rebautizar a la "Calle Sauces" como "Calle las Carrozas".Continuando por el actual Jr. Amazonas, se llegaba a la nombrada "Calle Martinete" que viene a ser, actualmente, la segunda parte de la cuadra 5 del Jr. Amazonas, entre el Jr. Huanta y el Jr. Huánuco. Allí se encuentran las mencionadas canchitas de Martinete donde Pinglo debe haber jugado muchas veces con sus compañeros del club Alfonso Ugarte. En su actual intercepción con el Jr. Huánuco, donde empieza el Puente Huánuco, se encontraba la antigua Portada de Martinete de la Muralla de Lima, por ello la importancia que tiene el Jr. Amazonas en la historia de Lima y el que se escriba correctamente el nombre de dicha zona "Martinete", ya que en las estadísticas de Lima que hicieron José María Córdoba y Urrutia en 1839 y Manuel Atanasio Fuentes en 1858, ellos lo escribieron de esa manera. Sin embargo, he leído que últimamente algunas publicaciones, al momento de hablar sobre esa zona, lo escriben como Martinetti.Pinglo realizó sus estudios secundarios en el Colegio Guadalupe, por lo que para ir a su colegio tenía que bajar por todo el Jr. Junín. Dicho jirón junto al Jr. Ancash son los que más debe haber recorrido Pinglo ya que él hizo su reducto en el Callejón del Fondo de la Calle Mercedarias, actual Jr. Ancash, y cuando se casó con Hermelinda Rivera se fueron a vivir a la "Calle Penitencia" (donde falleció), una calle extensa que actualmente, en numeración, viene a ser la primera, segunda y tercera cuadra del Jr. Paruro. Dicha calle se intercepta con el Jr. Ancash, al igual que la "Calle Rufas", paralela a Penitencia, que fue donde vivía Hermelinda Rivera cuando Pinglo la conoció el 24 de mayo de 1925. La Calle Rufas es una cuadra grande que viene a ser actualmente, en numeración, la primera, segunda y tercera cuadra del Jr. Huanta, entre el Jr. Amazonas y el Jr. Ancash.Felipe Pinglo, en junio de 1919, compuso el vals "Leonidas Yerovi" para honrar la memoria del escritor y poeta Leonidas Yerovi, quien nació el 9 de setiembre de 1881 en la "Calle Bravo". Dicha calle era una cuadra larga que abarcaba a las actuales cuadras 2, 3, 4 y 5 de la Av. Sebastián Lorente (ex Av. De los Incas).Se debe también nombrar al barrio chino que fue donde Felipe Pinglo se inspiró su vals "Sueños de Opio", especialmente en la "Calle Capón". Al respecto, debo señalar que muchos están equivocados con el origen del nombre de esta calle, mayormente los chinos, ya que no debe su nombre a algún chino o palabra china.Existe un mito o "cuento chino" con respecto al origen del nombre de la Calle Capón, del cual conté anteriormente su verdadero origen. Los chinos han tratado de hacer creer que el origen del nombre de la calle aquella se debe a ellos y, en octubre de 2005, a raíz de que se conmemoraron 150 años de haberse los chinos establecido en Lima, la versión de los chinos fue recogida por varios medios de prensa, que no se tomaron la molestia de investigar.Los primeros inmigrantes chinos llegaron al Perú en 1849 a trabajar en haciendas que no estaban en Lima. En 1855 empiezan los chinos a ubicarse en Lima, especialmente en la Calle Capón que era una cuadra grande. La versión que cuentan los chinos es que la Calle Capón debe su nombre a que en dicha calle se mataban a los animales para consumo, capándolos a algunos de ellos, siendo los chinos los que se dedicaban a este oficio. Dicha versión, sobre el origen del nombre de la Calle Capón, es solamente un mito o "cuento chino", porque la calle aquella ya se llamaba Capón desde el siglo XVII. Manuel Atanasio Fuentes en su "Estadística General de Lima", de 1858, señala a la Calle Capón la cual aparece también en el plano de Lima de dicho año. También se puede revisar la obra de José María Córdoba y Urrutia: "Estadística histórica, geográfica, industrial y comercial del Departamento de Lima", 1839, que fue impresa cuando los chinos, estando todavía en su tierra, ni siquiera sabían que existía el Perú. Hay documentos más antiguos donde figura el nombre de la Calle Capón.En el siglo XVII vivió en dicha calle un sacerdote de nombre Manuel Loayza quien tenía como apodo "Capón", así que desde el siglo XVII, 200 años antes de que llegara el primer chino al Perú, esa calle se conoció con el apodo del mencionado sacerdote. La Calle Capón, en el actual Jr. Ucayali, era también una cuadra grande que abarcaba desde el actual Jr. Ayacucho hasta el Jr. Paruro; lo que significa que comprendía a las actuales sexta y séptima cuadras del Jr. Ucayali. Sin embargo, hoy en día llaman solamente Calle Capón, por desconocimiento, a la parte comprendida entre el Jr. Andahuaylas y el Jr. Paruro, que vendría a ser la séptima cuadra del Jr. Ucayali.Pinglo debe haber visitado los lugares donde nacieron y vivieron grandes figuras de nuestras letras como nuestro tradicionista Ricardo Palma quien nació en la Calle Puno, actual tercera cuadra del Jr. Ayacucho, en un solar que todavía existe y tiene una placa señalando que allí nació nuestro ilustre literato. Manuel Ascencio Segura nació en la Calle Mestas, actual cuadra 10 del Jr. Huanta. César Vallejo vivió en la Calle Acequia de Islas No. 425, actual séptima cuadra del Jr. Huánuco. En dicha calle nació Nicomedes Santa Cruz Aparicio el 15 de setiembre de 1870, padre de Victoria, Nicomedes, César, Rafael, Rosalina, Pedro, Octavio, Fernando, Jorge y Consuelo Santa Cruz. Antonio Raimondi también vivió en los Barrios Altos, pero lo nombraré más adelante.Felipe Pinglo debe haber recorrido todo los Barrios Altos, por lo que nombrar todas sus calles ocuparía, fácilmente, muchísimas páginas. Por ello, falta de espacio y tiempo, es que en otra oportunidad continuaré recorriendo y contando, junto al Maestro Pinglo, solamente sobre las calles del Jr. Junín y el Jr. Ancash, en lo que corresponde a los Barrios Altos, ya que, pienso, son las que el Maestro debe haber recorrido más en su vida. Sin contar que dichos jirones son considerados como corredores turísticos de los Barrios Altos, debido a la enorme riqueza arquitectónica, cultural e histórica que encierran sus construcciones y calles.

Escrito por Dario Mejia.

Sobre poema de Lorenzo Bazo

El poema completo de Lorenzo Bazo, escrito en 1853, lo puede encontrar en la Sala de Investigaciones de la Biblioteca Nacional del Perú en un cuaderno de poesías titulado "Murmullos del Rímac".

En una de las estrofas del poema de Bazo dice:

Adiós palomita ingrata,
pues te separas de mí,
Dios quiera que halles un nido
donde puedas ser feliz
y adonde mis tristes quejas
no te puedan perseguir.

Con respecto al trabajo de Chalena Vásquez, hay alguna similitud en el poema de Bazo con "Palomita ingrata". Pero Chalena Vásquez no da ninguna referencia con respecto a "Palomita ingrata", en el sentido de que no dice a quien pertenece ni de que año es la canción aquella. Ella solamente comenta que algunos versos de "Las serranitas" han sido tomados de otros lugares, no mencionando nada sobre "Palomita ingrata", lo cual hace presumir que dicha canción también tomó sus versos de otros lugares o fuentes, lo cual era una costumbre muy común antiguamente ya que se tomaba letras de poemas y les ponían música creando canciones de esa manera.

Sería cuestión que le consulte a Chalena Vásquez por si tiene más información sobre "Palomita ingrata", porque en lo que corresponde al poema de Bazo, hay documentos verificables que indican que su poema fue escrito en 1853. Saludos.


Dario

Sobre el Vals "El Exposito"

A ciencia cierta, "El Expósito" es de Pedro Espinel. Hay cierta confusión con aquel vals que lo aclaré, del todo, en Julio del 2005, cuando regresé de un viaje que hice a Lima.Hace unos meses lo volví a mencionar por aquí a raíz de una conversación sobre Pedro Espinel. Se debe tener cuidado con las fuentes que uno consulta sobre la obra del Maestro Pinglo, porque, sin ninguna prueba contundente, se le han adjudicado canciones que no le pertenecen. Hace unos días fui testigo de una de esas canciones que se le han adjudicado.

Te copio los párrafos que escribí sobre "El Expósito", donde se aclara la autoría de ese hermoso vals:

Cuento el caso del vals "El Expósito", de Pedro Espinel, que algunos se lo adjudican a Felipe Pinglo, habiendo, incluso, el hijo de Pinglo declarado en una entrevista de hace 20 años, cuando todavía estaba vivo, de que ese vals era de su padre. El hijo de Pinglo se basaba en que su padre nunca conoció el amor de madre y que sus tías le recordaban lo que dijo ella antes de morir de sobreparto: "Ay hijo, cuanto me cuestas". Pero, esa suposición no la considero seria ni tampoco una prueba puesto que no mostró nada escrito que sustentara lo que decía.

En mi última visita a Lima, buscando entre periódicos antiguos, pude encontrar, y fotocopiar, la entrevista que le hizo "La Prensa" a Pedro Espinel el 21 de junio de 1938, siendo, quizás, la primera entrevista que le hizo un medio de prensa escrita, a dos años de la muerte de Pinglo, ya que por ese tiempo los medios de prensa tenían postergada a la música criolla. El artículo lleva como título "La Música Criolla Nacional se halla en una situación de auge alentador", página 5 de la edición antes mencionada. Espinel dice: "A partir de 'Fin de Bohemio' he tenido otros éxitos con 'El Expósito', vals; 'Bom Bom Coronado', polca; 'Dos reliquias', vals; 'Celos míos', vals; y muchísimas otras creaciones que sería largo enumerar, que los editores han ido dando a conocer al público en forma casi periódica y que, desde la radio, los intérpretes vienen propalando continuamente, pero sin que ello signifique para mí, aparte del mero aplauso y del cariño, poco o nada desde el punto de vista económico."

Muy sabido es la gran amistad y respeto que Pedro Espinel sentía por el Maestro Pinglo, por lo que pienso que no se hubiese adjudicado la autoría de una canción que no le pertenecía y, por sus declaraciones ante La Prensa, se desprende, y comprueba, que "El Expósito" le pertenece al gran Pedro Espinel.


Dario Mejia

la Musa Jaranista de Juan Gonzalo Rose

La musa jaranista de Juan Gonzalo Rose

El 12 de abril de 1983 se apagó la vida del gran poeta peruano Juan Gonzalo Rose. Tacneño de corazón, Rose había nacido en los Barrios Altos de Lima el 10 de enero de 1928, pero siendo muy niño lo llevaron a Tacna donde transcurren los mejores años de su vida, la niñez. Por ello es que Rose siempre decía que era tacneño, porque su corazón latía por esa bella tierra y dicen que uno es del lugar donde su corazón está.

Siendo adolescente se traslada a Lima donde termina de estudiar sus últimos años de la secundaria, primero en el Colegio Claretiano y después en el Colegio Nacional José María Eguren. En 1945, de 17 años de edad, ingresó a la Facultad de Letras de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos donde la política lo atrajo y fue dirigente estudiantil.

Al inicio de la década de los cincuenta, Rose, por sus ideas políticas, experimenta el exilio en México donde vivió varios años. Pero antes de que ello sucediera, la bohemia y la música popular ya lo había ganado. Es en ese tiempo que Juan Gonzalo Rose le compone un vals de homenaje a Felipe Pinglo que lo titula "Felipe de los Pobres".

Felipe de los Pobres
(Vals Peruano)
Juan Gonzalo Rose

Felipe de los Pobres
tu musa es jaranista.

Antes de que se fuera
tu último cantar
colgaste en las estrellas tu guitarra,
en el cielo de un barrio popular. (Bis)

En cada noche un valse de Felipe,
limeño pinturero y palangana,
quebrando en dos la cinturita firme
que se deslíe al sol de la jarana.

En cada barrio un valse de Felipe,
palomilla de costillas musicales,
que es trovador de calcetines rotos
de una niña prisionera en sus cristales. (Bis)

Durante una entrevista radial que le hiciera el periodista César Levano al poeta César Calvo, el 4 de junio de 1998, la cual fue reproducida por Luis Justo Caballero en la edición No. 8 de su Cuadernos de Música Peruana, Marzo 2003, César Levano, quien conoció a Juan Gonzalo Rose desde su juventud, contó que el vals inicial de Rose tenía una letra diferente en su segundo verso. Levano, cuando entrevistó a Rose en 1980, le hizo notar que antes de que se vaya a México él cantaba: "Felipe de los Pobres / tu musa es comunista...". Rose contestó que sí y como en México había en exilio apristas, comunistas y socialistas en general, él pensó que era sectario decir "tu musa es comunista" por lo que lo cambió por "tu musa es socialista". Pero como Fernando Belaúnde estaba en el poder, en ese tiempo (1980), entonces lo cambió por "tu musa es jaranista"... y así se quedó.

Rose se consolida como poeta en la década de los cincuenta y después de escribir poesía de contenido social, en los sesenta Rose empieza a escribirle al amor y sus versos acarician con ternura la mente y el corazón del pueblo haciendo que se convierta en uno de los poetas más importantes de la literatura peruana del siglo XX.

Al inicio de los setenta, Tania Libertad se consagra como intérprete al ganar el Festival de la Canción y la Voz en Chiclayo, cantando, y estrenando, el vals "Tu Voz" de Juan Gonzalo Rose. La misma Tania Libertad ganaría después el Festival de la Canción Peruana interpretando otro vals de Juan Gonzalo Rose, "Si un rosal se muere".

Rose le rindió un homenaje al Mártir José Olaya con el vals "Pescador de Luz". Un poema suyo dedicado al héroe peruano, el Almirante Miguel Grau, ha sido, hace pocos años, musicalizado en ritmo de tondero por el compositor y pianista peruano Víctor Merino, "Por el Mar Libre".

Si muy bien, Juan Gonzalo Rose partió de este mundo hace más de 20 años, su poesía lo mantiene vivo con nosotros y sus composiciones musicales nos siguen alegrando el alma y el corazón cada vez que las escuchamos.


Dario Mejia
Melbourne, Australia

Recondita

Muy interesante la observación que me hizo llegar Alonso Rabí Do Carmo, docente, poeta y periodista que escribe para El Comercio. Le agradezco que se haya tomado el tiempo de hacerme saber que hace poco fue lanzado al mercado una producción discográfica, que es una antología del trabajo musical de Rosa Mercedes Ayarza, la cual contiene el vals "Recóndita" interpretado por Nedda Huambachano. En el disco aquel le atribuyen el tema, o la música, a Rosa Mercedes Ayarza, la más notable recopiladora de música peruana.

Rosa Mercedes Ayarza nació en Lima el 8 de julio de 1881. Fue una niña prodigio de la música realizando su primera presentación en público, tocando el piano, a la edad de 8 años, el 28 de setiembre de 1889. Unos años después, a pedido de Abelardo Gamarra "El Tunante", la niña aquella llevó al pentagrama la marinera "La Concheperla", conocida también como "La Decana".

Compositora, folklorista e investigadora, salvó del olvido infinidad de canciones populares de la costa. Escribió las obras: "Antiguos pregones de Lima", "Estampas limeñas" y "Canciones escolares". Como profesora de música y canto tuvo como alumnos a Alejandro Granda, Lucrecia Sarria y Luis Alva. Falleció el 2 de mayo de 1969.

Si muy bien una producción discográfica debe mencionar al autor de la letra y compositor de la música de las canciones, si es que son diferentes personas, hay casos en que se equivocan al nombrar al verdadero autor de la obra aquella. Por ejemplo, les aseguro que en la Argentina no van a encontrar ninguna producción discográfica que contenga el vals "Aurora" interpretado por Carlos Gardel y que mencione, en el mismo, que Federico Barreto es el autor de la letra, a pesar que se ha demostrado que nuestro poeta tacneño es el verdadero autor de la letra aquella.

Tampoco van a encontrar en el Perú una producción discográfica que contenga el vals "China hereje" y que mencione que el autor es el payador uruguayo Juan Pedro López.

Lo que tengo entendido es que para el disco recopilador de Rosa Mercedes Ayarza se han utilizado partituras que ella dejó. Pero se debe tener en cuenta que ella recopiló infinidad de canciones, así que no todas las canciones que puedan aparecer en las partituras aquellas le pertenecen, por lo que pienso se pueden cometer equivocaciones fácilmente.

Con el vals "Recóndita" me sucedió una anécdota muy interesante hace unos años. Cuando empecé a elaborar las efemérides criollas, mi deseo era que se uniera la mayor cantidad de gente posible para dicha elaboración, por lo que empecé a compartirlas para que se publiquen en la net y de esa manera despertar el interés por las mismas. Con el correr del tiempo, varios medios de prensa las han publicado en parte. Estando en la net, ya hace unos años, me contactó un investigador de la música colombiana que tenía un archivo enorme de grabaciones musicales de su país, desde que se empezaron a grabar. El investigador aquel me felicitó por la efemérides aquellas ya que, según él, no había encontrado un trabajo similar de la música popular de algún país latinoamericano y al ver mis efemérides le entró el deseo de hacer algo similar con la música de su país ya que contaba con un material bibliográfico y discográfico enorme. No sé si empezó a realizar el trabajo aquel o solamente se quedó en deseos, pero lo que si sé es que después encontré un trabajo sobre el tango elaborado en la Argentina por una asociación, con el concurso de muchas personas.

El colombiano aquel me comentó que quien le había puesto la música al soneto "Recóndita" de Leonidas Yerovi era el gran compositor colombiano Pedro Morales Pino, contemporáneo de Yerovi, quien si conservó el nombre original del soneto. También me mencionó que toda la producción musical de Pedro Morales Pino le pertenecía en letra y música, con excepción de "Recóndita" que fue la única pieza musical cuya letra no le pertenecía ya que era de Leonidas Yerovi.

Lo más grandioso es que este investigador tenía una versión muy antigua de "Recóndita", quizás la primera que se le hizo. Lo malo es que un tiempo después le entró un virus a mi PC y perdí mucha información que tenía almacenada, incluyendo el nombre y email del investigador aquel, del que nunca más supe nada.

Cuando estuve en Lima en el 2005, revisando entre periódicos, revistas y libros antiguos en la Biblioteca Nacional, encontré que Aurelio Collantes, en su "Documental de la Canción Criolla", Lima 1972, refiriéndose al soneto "Recóndita" de Leonidas Yerovi, señala lo siguiente: "En diciembre de 1922 llega a Lima la renombrada Lira Colombiana conocidos en América como 'Los Reyes del Bambuco', cuyo director era el notable compositor Pedro Morales Pino, quien tuvo la gentileza de poner música al tema del nunca bien llorado lírida y cuya pauta musical fue publicada en la Revista 'Mundial', para canto y piano".

La versión de Collantes vino a confirmar lo que ya me había contado anteriormente este personaje colombiano a quien, lamentablemente, por esos gajes de la internet, nunca más pude contactarlo. Saludos.


Dario Mejia
Melbourne, Australia
dariomejia999@yahoo.com.au

Callejones famosos de los barrios Altos

Leyendo un artículo de César Hildebrandt del jueves 25 de enero, donde menciona, solamente de nombre, a Billinghurst, se me vino a la memoria la relación de Billinghurst con el barrio chino de Lima.

En 1909, siendo alcalde de Lima, con el pretexto de mejorar la ciudad y sus calles, el entonces alcalde de Lima, Guillermo Billinghurst, quien después fue Presidente del Perú de 1912 a 1914 no terminando su mandato ya que fue derrocado, mandó derribar el Callejón de Otayza, donde vivían una cantidad enorme de chinos, abriendo la calle que viene a ser la actual séptima cuadra del Jr. Andahuaylas. Dicha calle no existía antes de 1911 y se conoce con el nombre de él, Billinghurst. La Calle Capón quedó cortada con la construcción de la calle aquella. El famoso Callejón de Otayza quedaba en donde actualmente es la esquina del Jr. Andahuaylas con el Jr. Ucayali (en plena pista) y fue el centro de concentración de muchos chinos a quienes se pretendió sacarlos del centro de Lima al derribar el mencionado callejón. Pero los chinos ya se habían integrado a la ciudad y se quedaron por las inmediaciones creando el barrio chino de Lima, que perdura hasta nuestros días.

La ciudad de Lima tenía, o tiene todavía, dos callejones del Buque, uno en los Barrios Altos y otro en La Victoria, siendo los dos muy famosos ya que fueron refugios del criollismo. Sabía que también habían dos callejones de las siete puñaladas en Lima, el que todavía sigue en pie en el Jr. Tayacaja y el que quedaba en los Barrios Altos por el cine Delicias, pero no estaba seguro de la ubicación exacta del que estaba por el cine Delicias ya que no lo llegué a conocer.

Hace poco, alguien que vivió hace años en los Barrios Altos, en Carmen Bajo y posteriormente en la cuarta cuadra del Jr. Cangallo, a unos metros del cine Delicias, me confirmó que el Callejón de las Siete Puñaladas, de los Barrios Altos, quedaba en el Jr. Cangallo No. 475. Dicho callejón fue derrumbado hace muchos años y en su terreno se construyeron dos edificios. En uno de los edificios aquellos vivió quien me dio el dato de la ubicación exacta del famoso callejón, que debe su nombre a que allí ocurrió un crimen pasional, que como se imaginaran fue a puñaladas.

Barrios Altos ha tenido muchos callejones, sobre algunos de ellos he contado anteriormente ya que fueron refugio del criollismo, como el Callejón del Fondo de la calle Mercedarias, donde solía hacer música Felipe Pinglo, y el Callejón de La Confianza, donde solía cantar el dúo Vargas-Checa del barrio del Chirimoyo. Ambos callejones fueron derrumbados hace años, pero Barrios Altos aún conserva en pie algunos callejones que si sus paredes o piso de tierra hablaran, nos contarían muchas historias y jaranas de las que fueron testigos.


Dario Mejia
Melbourne, Australia

Los Paracaidistas

Los paracaidistas

Durante una reunión de hace unos días, un amigo contó la experiencia que tuvo practicando "skydiving". Ello consiste en saltar de un avión en pleno vuelo y a 4,000 metros de altura, apróximadamente, volando en caída libre cerca de un minuto para luego abrir el paracaídas.

La aventura del amigo aquel trajo a mi mente los recuerdos de cuando fui "paracaidista". Pero, no es que haya sido un émulo de Icaro, volando libremente por los cielos; tampoco fui uno de aquellos combatientes que en el fragor de la batalla caía del cielo en paracaídas para sorprender y vencer al enemigo. Lo que si, fui uno de aquellos que caían en forma sorprendente en las fiestas, sin tener invitación, y a los cuales en el Perú los conocían con el apelativo de "paracaidista".

Los paracaidistas no eran tipos que cayeran mal en alguna fiesta, sino que más bien eran celebrados por ser respetuosos, alegres, conversadores, bailarines y, en muchas oportunidades, hasta se convertían en el alma de las fiestas improvisando versos para los dueños de la casa o para la muchacha que cumplía años. Mayormente, era durante la celebración del cumpleaños de alguna bella doncella donde caían los paracaidistas, quienes no podían resistir a la tentación de ser partícipes de tan bello acontecimiento y aprovechar ello para poder bailar con la muchacha que atraía las miradas y suspiros de todos los muchachos del barrio.

Generalmente, los paracaidistas conocían a alguno de los invitados a la fiesta y llegaban con él, o ella, o lo mandaban llamar desde la puerta para entrar juntos a la fiesta, como si hubiesen sido también invitados.

Muchos criollos de antaño fueron paracaidistas, pero ellos fueron muy bien recibidos en toda fiesta a la cual llegaban ya que se aparecían con guitarra y cajón que, sumados a sus grandiosas voces, alegraban toda fiesta terminando ésta en una jarana fenomenal.

Como paracaidistas famosos tenemos a los muchachos que integraban la legendaria Palizada y que fueron el alma de muchas fiestas durante fines del siglo XIX e inicios del siglo XX. Dicho grupo solía caer, o meterse, en cualquier celebración llevando consigo solamente su presencia, alegría, dotes de bailarines y versos que solían improvisar para deleite de todos los presentes.

Casualmente, el nombre de la Palizada se lo pusieron a los muchachos aquellos por ser paracaidistas, que se metían a todos lados sin ser invitados. Fue una noche en que los muchachos aquellos se divertían en un templo del amor de Abajo el Puente, cuando una brava y atronadora avenida del Rímac empezó a ocasionar daños considerables arrastrando sus aguas torrentosas palos, troncos y todo lo que encontraba. Los palos que el río arrastraba, en forma atropellada, se metían en los cercos y chozas, siendo todo ello observado desde los balcones de la casa aquella ocurriéndosele a una de las muchachas comparar a los niños terribles aquellos con la palizada furibunda y terrible que estaban presenciando ya que, del mismo modo, ellos se colaban en tropel a cualquier parte, sin ser invitados y causando destrozos muchas veces. A partir de esa noche se les conoció a esos muchachos como la Palizada, grupo que ha dejado muchas páginas, y aventuras, escritas en el criollismo limeño.

En lo personal, mi inicio como paracaidista fue a la edad de quince años. Recuerdo muy bien que era el quinceañero de una muchacha de mi antiguo barrio y la fiesta se llevaba a cabo en la casa de un familiar de ella en Maranga. La chica aquella solamente había invitado a unos cuantos del grupo con los que paraba, incluido uno de mis hermanos del cual ella estaba enamorada. Como no había estado aún en un quinceañero, con otro amigo convencimos a los que si tenían invitación para llegar en grupo a la fiesta y colarnos en ella los dos que no habíamos sido invitados.

En ese tiempo no tenía saco, menos terno, por lo que uno de mis amigos se ofreció para prestarme un saco extra que él tenía. A la hora en que nos reunimos en el barrio para ir a la fiesta, el amigo aquel se apareció con el saco extra y cuando me lo fui a poner me di con la sorpresa de que las mangas me quedaban tres cuartos solamente. El saco aquel resultó ser el de colegio que mi amigo utilizó en la primaria, pero como yo, de todas maneras, quería ir al quinceañero, pues llevé el saco en la mano y me lo puse solamente a la hora de entrar a la casa donde era la fiesta. Claro que entré a la casa en medio de mis amigos para que los demás invitados no vieran que la manga del saco era solamente tres cuartos y que me quedaba más ajustado que pantalón de torero. Una vez dentro de la casa, hasta me di el gusto de bailar a las doce con la quinceañera... por supuesto que bailé sin el saco puesto.

Con los amigos del barrio es que uno agarraba experiencia como paracaidista. Cuando ya tenía muchas horas de "caída libre y sorpresiva" en fiestas, me sucedió una anécdota que nunca olvidaré, porque a todos nos llega nuestro Waterloo. Recuerdo muy bien que era un día de año nuevo y luego de quemar los muñecos en mi antiguo barrio, nos encontrábamos reunidos un grupo de amigos en la esquina del barrio. Uno de ellos comentó que unas hermanas tenían una fiesta, pero había que ir a sacarlas de su casa que quedaba en la Calle Rastro de la Huaquilla, actual tercera cuadra del Jr. Cangallo, en los Barrios Altos. Como el año nuevo era para pasarlo bailando, en lo posible, nos fuimos a buscar a las hermanas aquellas y con ellas nos fuimos a la fiesta que quedaba a la vuelta de la casa de ellas, en una quinta de la Calle del Carmen Bajo, actual cuadra 10 del Jr. Junín.

Una vez en la fiesta, me sentí atraído por una muchacha muy bella, de pelo castaño y ojos claros, así que a la primera oportunidad que tuve la saqué a bailar y salí premiado porque justo habían puesto uno de los famosos Toques Musicales de Rulli Rendo, que eran infaltables en las fiestas de año nuevo, por lo que tenía todo un long play para bailar con la chica aquella.

Justo, unas horas antes, había leído mi horóscopo en un periódico y me auguraba un buen inicio del año. La luna estaba llena esa noche y hasta había notado que se podían ver algunas estrellas en el cielo, algo muy raro de ver en el cielo limeño. Todo ello, sumado a la belleza de la chica, me inspiró, así que alegremente estuve conversando de muchas cosas con ella. Pero, en un momento determinado, ella me preguntó como había llegado a la fiesta y le dije la verdad... que había caído como paracaidista con un grupo de amigas. ¡Ahhh!, dijo ella solamente, quedándose después callada. Al preguntarle si ella vivía cerca, ella me dijo que esa era su casa y que no sólo estaban celebrando el año nuevo sino que también su cumpleaños. No supe donde meterme, o esconderme, en ese momento, así que lo único que atiné fue a felicitarla por su cumpleaños y ya no la volví a sacar a bailar. Creo que debí demandar al que escribía los horóscopos en el periódico.

Lo bueno era que los paracaidistas solían portarse con respeto en las fiestas, por ello no caían mal. Con el correr de los años, dicha figura se tergiversó y lo que ahora existen son "zampones", quienes no utilizan el ingenio y picardía para introducirse en alguna fiesta, como solían hacerlo los paracaidistas, sino que los "zampones" se introducen a las fiestas a la mala y, para colmo, se emborrachan, se comportan en forma insolente causando hasta peleas, terminando por malograr las fiestas.

El paracaidista de antes ya desapareció, aunque muchos han experimentado, alguna vez en su vida, el paracaidismo aquel. Ahora sólo nos quedan los bellos recuerdos de una etapa traviesa, pero respetuosa, de nuestras vidas.


Dario Mejia
Melbourne, Australia
dariomejia999@yahoo.com.au

Del Puente a la Alameda

Del Puente a la Alameda

No cabe la menor duda de que si Victoria Angulo siguiese viva, estaría de nuevo recorriendo a pie el camino del Puente a la Alameda como lo hizo muchas veces, cuando vivió Abajo el Puente (Rímac), estremeciendo las veredas al ritmo de sus caderas y que nuestra gran Chabuca Granda inmortalizara en "La Flor de la Canela".

Un amigo me mencionó que antiguamente, cuando llovía mucho en la Sierra, los camarones ingresaban a Lima por la acequia Huatica. Ello trajo a mi memoria de que muchos años atrás habían camarones en el río Rímac que hasta una calle del Rímac se llamaba "Camaroneros", debido a que allí vivían muchos de los que se dedicaban a la pesca y venta de los camarones que cogían de nuestro río hablador. Años más tarde, la contaminación del río Rímac hizo que desaparecieran los camarones.

El amigo aquel también me mencionó que de niño solía ir, con sus padres y hermanas, al Rímac cruzando por el viejo Puende de Palo, que ya no existe. Lo que desconocía el amigo aquel es que dicho Puente de Palo es al que Chabuca Granda se refiere en "La Flor de la Canela", no el Puente de Piedra como muchos, equivocadamente, mencionan. Dicho puente quedaba en la curva del ferrocarril Lima-Ancón y comunicaba al Jirón Arica (actual Jr. Rufino Torrico) con Abajo el Puente. Victoria Angulo vivía en un corralón frente al mencionado Puente de Palo.

Cuando "La Flor de la Canela" se había vuelto ya popular en el pueblo peruano, y cruzado sus fronteras, la revista "Caretas" quiso entrevistar a Victoria Angulo ya que se enteraron que el personaje de la famosa canción de Chabuca Granda existía realmente. Chabuca aceptó llevar a los periodistas de Caretas a que conocieran a Victoria Angulo, pero les dijo que los llevaría a la casa de ella a través del viejo Puente de Palo que era por donde Victoria Angulo solía transitar diariamente. Así que Chabuca los hizo cruzar el viejo puente aquel para dirigirse a la casa de Victoria y Caretas, en su edición No. 97 del 5 de noviembre de 1955, pudo ser el primer medio de prensa que publicó una entrevista a la bella Flor de la Canela, de la cual Chabuca nos contó en su inmortal canción.

La importancia que tiene el Puente de Piedra para la ciudad de Lima es muy grande. Dicho puente incrementó el tránsito entre el Cercado de Lima y Abajo el Puente, cuando se construyó a inicios del siglo XVII. Especialmente, aumentaron los paseos a la Pampa de Amancaes que era una tradición antigua que perduró por más de 400 años y que lamentablemente ya no existe. Pero, unos años antes de que se construyera el Puente de Piedra aquel, existió otro Puente de Piedra que la fuerza del río Rímac trajo abajo en 1607. El que tenemos hasta nuestros días fue mandado a construir por el Virrey Juan de Mendoza y Luna, Marqués de Montesclaros. Al construir, dicho virrey, la llamada Alameda Grande, hoy de los Descalzos, Abajo el Puente cobró más importancia creciendo el interés por dicha zona, que años más tarde se volvería en uno de los barrios más tradicionales de nuestra vieja Lima.

La Alameda de los Descalzos vio nacer, como cantante, al barrioaltino Eduardo Montes del dúo Montes y Manrique ya que allí, Eduardo Montes, solía reunirse con su maestro de canto, Alfredo Pastor, para ensayar ante la presencia de casi todo el Rímac, que concurría a deleitarse con las hermosas voces de ambos. Ante las bellas y románticas estatuas que tenía dicha Alameda, la voz de Montes se fue forjando tomando el suave fresco de las magnolias que adornaban la Alameda aquella.

Al igual que Eduardo Montes, muchos criollos de antaño solían visitar la Alameda de los Descalzos por su belleza y romanticismo que de ella emanaban. Nuestros criollos antiguos, poetas, románticos y trovadores, deben haberse inspirado o haberle cantado a algún amor en las bancas de la Alameda aquella. Lo mismo que muchos rimenses deben haberle robado su primer beso a alguna de las muchachas del barrio mientras ellas se sentían atraídas, encantadas y magnetizadas por dicha Alameda. Sin ser rimense, recuerdo haber ido muchas veces, de muchacho, por las noches a pasear y admirar la Alameda aquella. Es por ello que creo que parte de su romanticismo se impregnó dentro de mí, haciendo que también lleve al Rímac dentro de mi corazón.

Los callejones de Malambo, en el Rímac, también vieron nacer al vals peruano. En el piso de tierra del Callejón de La Cruz, de la calle de Malambo, la más grande bailarina de marinera que haya tenido el Perú, Bartola Sancho Dávila, empezó a dar sus primeros movimientos de cadera y revoloteo de pañuelo, tejiendo con los pies como si fuera una araña, como una vez lo señalaría Augusto Azcuez. Bartola nació en una casa al costado del mencionado callejón, el 24 de agosto de 1883.

En Malambo recibió sus primeras lecciones de canto Manuel Quintana Olivares "Canario Negro", de parte de Bartola e Isabel Sancho Dávila (prima de Bartola). Malambo fue también el barrio de Augusto y Elías Azcuez, Luciano Huambachano, Braulio Sancho Dávila y muchos criollos de renombre. En el Callejón de Santa Rosa, de Malambo, nació el ídolo de Alianza Lima y gran artista del fútbol alegre y pícaro, Alejandro Villanueva, a quien Felipe Pinglo le dedicara dos composiciones y Pedro Espinal una.

La historia del criollismo en Malambo recuerda también a un rimense que vivía en Portada de Guía a quien se le conocía como "Monumento", ya que medía dos metros. Se cuenta que nadie, a través de los años transcurridos, ha podido sobrepasar, ni siquiera igualar, el exquisito "Seco de gato" que solía preparar este personaje y que fue el plato fuerte en muchas noches de jarana que tuvieron los criollos de antaño del Rímac.

La flor y nata del criollismo estaba en Malambo, pero ello ha quedado solamente en el recuerdo y algunas crónicas que lo mencionan, con la finalidad de que las nuevas generaciones conozcan la historia de nuestra música criolla y como fue forjándose en sus callejones y calles.

El Rímac fue también el barrio de Alejandro Sáez, Néstor Chocobar, Filomeno Ormeño, "La Morena de Oro del Perú" Lucha Reyes y del chancayano Jorge Bravo de Rueda, cuando se mudó a Lima. Pedro Espinel, quien nació en la Calle de Los Naranjos de los Barrios Altos, vivió muchos años en el Rímac encariñándose tanto con el distrito aquel que llegó a ser hasta concejal del mismo.

El Rímac, bastión del criollismo, cumple un aniversario más de su creación política como distrito, el 2 de febrero. Es por ello que una vez más he querido contar sobre ese barrio tradicional e histórico al cual espero se le brinde la importancia y cuidado que se merece, porque forma parte de la historia de Lima y sus costumbres.


Dario Mejia
Melbourne, Australia
dariomejia999@yahoo.com.au

El amor en tiempo de Vals

El amor en tiempo de vals

El amor ha sido fuente de inspiración del ser humano por los siglos de los siglos. Nuestros bardos criollos no han podido escapar al embrujo, magia, misterio, pasión y tentación que trae consigo el amor; cantándole a su alegría, dicha y también a su desengaño y otros sentimientos que hace despertar.

Al hablar del amor expresado por nuestros bardos a través de sus composiciones, se tiene que mencionar a Mariano Melgar, el poeta patriota y romántico, quien a través del yaraví cantó y lloró la pena que lo agobiaba por no poder gozar del amor de su amada Silvia. La oposición de los padres de Silvia, a su relación con el poeta, influyó en ella para que lo rechazara. El dolor de perder a Silvia entristeció mucho al poeta y ese sufrimiento fue trasladado a sus yaravíes... "¿Por qué a verte volví, Silvia querida? / ¡Ay triste! ¿para qué? ¡Para trocarse / mi dolor en más triste despedida! / (...) Lloro... no puedo más... Silvia querida, / déjame que en torrentes de amargura / saque del pecho mío el alma herida."

El vals "Aurora", cuya letra pertenece al poeta tacneño Federico Barreto y la música a Carlos Gardel, le cantó al amor traicionado..."Aurora, me has entregado al abandono, / y yo que tanto y tanto te he querido; / ni tu negra traición echo al olvido, / ni disculpo tu error, ni te perdono..."

Dicen que del odio al amor o del amor al odio hay un solo paso. Felipe Pinglo, en su vals "Pasión y Odio", nos dejó algo al respecto... "Ayer la amaba yo, hoy mi pasión es cruel, / termina en mí el deseo de amarla otra vez. / En mi memoria está promesa de infame mujer / que el tiempo no logró a lapidar un mal querer. / (...) Las mejillas que un día mis labios colorearon, / el polvo del olvido las ha envuelto en el fango. / ¡Hoy odio a la mujer que antes idolatré!"

En el vals "Odiame", de Rafael Otero, también se puede ver algo de amor y odio. La letra de dicho vals, en parte, fue tomada del soneto "Ultimo ruego" de Federico Barreto... "Si tú me odias quedaré yo convencido / de que me amaste, mujer, con insistencia; / pero ten presente, de acuerdo a la experiencia, / que tan sólo se odia lo querido."

El odio y el amor ha dado pie para muchos temas, como el vals "Dolor y odio" de Angel Aníbal Rosado... "Así como te quise, / así te odio ahora; / tú me obligaste a ello, / no te podrás quejar."

Cuando el compositor barrioaltino Augusto Rojas LLerena tenía 15 años, en el año de 1939, se enamoró de una chica mayor que él, de 22 años, quien terminó quedándose con otro. Aquel amor trunco dio pie a que Rojas LLerena expresara el rencor que ello le produjo, naciendo así el vals "Rencor"... "Creíste que sin tu amor no iba a vivir, / mostrándome indiferente te dejé; / si me quisiste fue por burla y nada más / ahora te odio y te aborrezco con rencor."

Un amor no correspondido dio origen al vals "Hermelinda" de Alberto Condemarín... "¡Qué triste, amada mía, / los días amanecen, / qué lentas son las horas / que estoy lejos de ti! / Para calmar la duda / que tormentosa crece, / acuérdate, Hermelinda, / acuérdate de mí."

Los prejuicios de la sociedad se opone a algunos amores y el vals "El Plebeyo", de Felipe Pinglo, denuncia aquello... "Después de laborar vuelve a su humilde hogar / Luis Enrique, el plebeyo, el hijo del pueblo, / el hombre que supo amar, / y que sufriendo está esa infamante ley / de amar a una aristócrata siendo plebeyo él. / Trémulo de emoción, dice así en su canción: / El amor siendo humano tiene algo de divino, / amar no es un delito porque hasta Dios amó..."

Los celos, de otra persona o de algo, también inspiraron a nuestros bardos. El vals "Celos" de Felipe Pinglo nos habla sobre ello... "Celos tengo de esos labios tan hermosos / que depositan besitos tan intensos / y celos tengo de la brisa mañanera / que besa y besa lo que besar no puedo."

Pedro Espinel también toca el tema de los celos en su vals "Celos míos"... "Cuantas veces aguardando yo impaciente / a la mágica beldad de mi soñar / mundo y vida he tenido ante mi frente / en amable y elocuente meditar. / Más de pronto una duda me ha azotado, / destruyendo la pureza de mi ser, / atrofiado por los celos he dudado / del afecto de tus mimos de mujer."

Angel Aníbal Rosado colabora con más celos con su vals "Mis celos"... "La angustia de no verte me atormenta, / me hiere con el dardo de la duda, / mil cosas, mil sospechas me devoran / haciendo de mi vida un martirio."

La espera, esa penosa y larga espera que el amor muchas veces nos hace pasar a todos, no pasó desapercibida por nuestros bardos criollos. Eduardo Márquez Talledo, en su vals "Alma de mi alma", toca el tema de la espera... "Ven, que ya no puedo resistir / la eterna condena de esperar. / Eres la razón de mi existir / y la inspiración de mi cantar. / Ven, porque sin ti me moriré, / ven, alma de mi alma, ven a mí; / ven, que de rodillas te diré / que mi amor es sólo para ti. / La noche avanza y solo estoy / porque mi amada no vendrá..."

El compositor Nicolás Wetzell pidió que lo esperen con su vals "Espérame"... "Espérame, / ¿no ves que me alimenta tu calor? / Espérame, / ¿no ves que moriría sin tu amor? / Escúchame / las últimas palabras que por ti / han brotado de mi enfermo corazón."

La espera desespera y el compositor José Escajadillo, en su vals "Cada día", nos lo da a entender... "Ven, que yo me muero de esperar, / ven, que ya agonizo de llorar; / vuelven las gaviotas a pasar / y este verano no vendrás."

La alegría y dicha de haber sido bendecidos con el amor, ha sido cantada muchas veces por nuestros bardos. Erasmo Díaz Yuiján le cantó a su amada con su vals "Cariñito"... "Desde hace tiempo / enamorado, enamorado estoy / de un cariñito que es mi gran felicidad / y desde entonces reina en mis cantares, / mis pensamientos, / mi corazón."

Alberto Haro también muestra la alegría que brinda el amor en su vals "Prenda mía"... "Nunca creí / que un beso de tus labios, mi bien, / me diera tanta dicha, prenda mía. / Quiero entregarte la llave de mi corazón / para adorarte siempre, alma mía."

La dicha del amor y lo que se siente cuando se está enamorado es expresado por Mario Cavagnaro con su vals "Vivir enamorado"... "Hoy te has quedado aquí, / no lo puedo creer, / por fin son para mí / tu vida y tu querer. / Por fin mi corazón / no muere de ansiedad, / por fin tanta ilusión / se vuelve realidad."

Oscar Avilés nos habla de la bendición del amor con su vals "Bendito amor"... "Navegando en la barca de la vida / muchos sufren sinsabores y amarguras, / pero todo se compensa en esta vida, / si se encuentra el verdadero amor. / Navegando en la barca de la vida / he sufrido sinsabores y amarguras, / pero todo se compensa en esta vida, / ya encontré el verdadero amor."

Hay mucho material para seguir hablando sobre el amor y como influyó en las composiciones de nuestros bardos criollos, así como también como influyeron o calaron en el público dichas composiciones. El amor siempre dará que hablar, claro que se espera que sea algo bueno lo que traiga a nuestras vidas; pero si ello no ocurre o por esas cosas de la vida se muere la ilusión y el amor, entonces habrá que cantar el vals "Se acabó y punto" de Félix Pasache... "Si todos los sueños que soñamos juntos, / no se realizaron, se quedaron truncos, / no hay que hacer un drama, / se acabó... y punto."


Dario Mejia
Melbourne, Australia
dariomejia999@yahoo.com.au

Leonidas Yerovi

LEONIDAS YEROVI

En enero del 2006 fue publicada en Lima la obra completa del escritor, periodista y poeta Leonidas Yerovi, quien falleció en forma trágica, el 15 de febrero de 1917, a la edad de 35 años. Dicha obra, que se presenta en tres tomos, ha sido publicada por el Fondo Editorial del Congreso, gracias al trabajo de compilación de su hija Juana Yerovi Douat y la edición y anotación de Marcel Velázquez Castro.

Nicolás Yerovi, escritor y nieto de Leonidas Yerovi, me manifestó que la obra completa de su abuelo fue recopilada durante más de veinte años por su tía Juana, hermana de su padre. En el transcurso de ese tiempo, la Sra. Juana Yerovi Douat acudió diariamente a la Biblioteca Nacional para transcribir a mano toda la obra de su padre que se encontraba desperdigada, entre 1903 y 1917, en los diarios y revistas de la época. Como resultado de aquel arduo trabajo, la obra completa de Leonidas Yerovi consta de más de dos mil páginas que han sido divididas en tres tomos.

Marcel Velázquez señala de que, por sus diversas funciones y su vasta producción, Leonidas Yerovi es uno de los fundadores del periodismo moderno en el Perú. Yerovi practicó todos los géneros vinculados al periodismo: letrillas políticas, artículos de costumbres, crónicas urbanas, comentarios de noticias internacionales, crítica literaria y notas policiales, añade Velázquez.

Leonidas Yerovi nació el 9 de setiembre de 1881 en la Calle de Bravo. En la Estadística General de Lima de 1858, de Manuel Atanasio Fuentes, se señalan dos calles antiguas de Lima con ese nombre: La que es la actual séptima cuadra del Jr. Rufino Torrico y una cuadra larga que abarcaba a las actuales cuadras 2, 3, 4 y 5 de la Av. Sebastián Lorente (ex Av. De los Incas), en los Barrios Altos de Lima. El nombre completo del poeta era Sergio Nicolás Leonidas Yerovi Douat y fue bautizado a las dos semanas de nacido, el 23 de setiembre, en la Iglesia de San Pedro, en el centro de Lima.

Realizó sus estudios primarios en el Instituto Franco-Inglés y su educación secundaria la hizo en el Colegio Nacional Nuestra Señora de Guadalupe. Siendo muy joven asumió las responsabilidades de su hogar debido a la ausencia de su padre. La facilidad que tenía para crear versos, así como su travieso ingenio, lo volvieron popular.

La obra de Leonidas Yerovi abarca poesía, ensayos de carácter humorísticos y comedias para teatro. A través de versos analiza, describe y satiriza la vida política y pública del Perú durante las primeras décadas del siglo XX. Sus trabajos fueron publicados en diversos medios de prensa como: "Actualidades", "Balnearios", "Caras y caretas" (de Buenos Aires), "Cinema", "Don Lunes", "El Tiempo", "¿Está Ud. bien?", "Gil Blas", "Ilustración peruana", "La Crónica", "La Prensa", "Lléveme Ud.", "Monos y Monadas" (que fundó en 1905), "Prisma", "Rigoleto", "Sucesos" (de Santiago de Chile) y "Variedades".

Como muestra de la gran capacidad de creación que tenía Leonidas Yerovi, se debe tener en cuenta que a la edad de 17 años, en 1898, fue el coautor de la letra de la marinera limeña "Catay zambita", junto a Federico Blume y Abelardo Gamarra "El Tunante"; la música fue compuesta por el músico arequipeño José Benigno Ugarte.

Una noche del año 1916, estando en la ciudad de Buenos Aires, mientras caminaba junto a su gran amigo Julio Málaga Grenet, caricaturista arequipeño que se desempeñaba como director de arte de la revista "Caras y caretas" de dicha ciudad y que había sido su colaborador en "Monos y Monadas", Yerovi se inspira y le hace escuchar a su amigo los versos del que sería su soneto "Recóndita".

Según Marcel Velázquez, el soneto "Recóndita" fue publicado en "El Tiempo" el 1 de marzo de 1917. Cinco años después, dicho soneto de Leonidas Yerovi fue convertido en vals, apareciendo en algunos cancioneros antiguos con los nombres de "Noches de bohemia", "Golondrinas" y "Amor bohemio". Muchos desconocen quien fue el que le puso música al soneto de Yerovi, pero fue el gran compositor y músico colombiano Pedro Morales Pino, contemporáneo de Yerovi, quien si conservó el nombre original de "Recóndita"... pero nuestro poeta no llegó a escucharlo.

Recóndita
Autor: Leonidas Yerovi

Como un ir y venir de ola de mar,
así quisiera ser en el querer:
dejar a una mujer para volver,
volver a una mujer para empezar.

Golondrina de amor en anidar
huir en cada otoño del placer
y en cada primavera aparecer
con nuevas tibias alas que brindar.

Esta, aquella, la otra... Confundir
de tantas dulces bocas el sabor
y al terminar la ronda repetir.

Y no saber jamás cuál es mejor
y siempre, ola de mar, ir a morir
en sabe Dios qué playa del amor.


La noche del 15 de febrero de 1917, el ciudadano chileno Manuel José Sánchez, en un arranque de celos, le descerrajó cuatro tiros a Leonidas Yerovi cuando éste se encontraba en la puerta del diario "La Prensa", sito en la Calle de Baquíjano, actual séptima cuadra del Jr. de la Unión. Yerovi fue llevado por sus amigos, en un automóvil, al puesto asistencial de la Plaza de San Marcelo donde, por la gravedad del caso, recomendaron que sea llevado a la Clínica Maison de Santé. Fue trasladado en camilla por las calles de Lima y la gente se sumaba al cortejo aquel al enterarse que se trataba del muy querido poeta. Pero las heridas eran de gravedad y el poeta fallecería dos horas después en la Clínica Maison de Santé.

Una joven artista, de nombre Angela Argüelles, amiga de Leonidas Yerovi y a quien protegía debido al poco suceso de su temporada teatral, fue quien despertó celos enfermizos en un admirador de ella que culminaron con la fatídica muerte del escritor.

Leonidas Yerovi era uno de los intelectuales más admirados, leídos y populares de Lima, por lo que su muerte fue muy sentida por todos. Según los diarios de la época, no menos de treinta mil personas acompañaron el cortejo fúnebre. Una demostración de dolor del pueblo peruano nunca antes vista ante la pérdida de un hombre de letras en el Perú. Después de su muerte, se publicaron algunos poemas inéditos del escritor.

El bardo Felipe Pinglo, en junio de 1919, compuso el vals "Leonidas Yerovi" para honrar la memoria del escritor y poeta. Como un homenaje de la ciudad de Lima hacia uno de sus grandes hombres de letras, varias calles de Lima llevan el nombre del escritor Leonidas Yerovi. Con la publicación de la obra completa de Yerovi, no sólo se le rinde un gran homenaje al escritor, sino que se permite que las nuevas generaciones puedan tener un mejor acceso a toda esa riqueza literaria que Leonidas Yerovi nos dejó.

Leonidas Yerovi
(Vals Peruano)
Autor: Felipe Pinglo

Se recuerda tu genial figura
oh poeta noble y generoso,
se recuerda que fuiste un coloso
de tu patria en la literatura.

En los teatros se hacen paladines
la muestra de tu sombra oh artista genial,
igualaste a la América Latina
con ese viejo continente intelectual.

Tú quisiste que tu nombre reposara
del elogio en el mundo, poeta,
con ironía y venganza se comenta
la desgracia que con tu vida pagaras.


Dario Mejia
Melbourne, Australia
dariomejia999@yahoo.com.au

la Mujer en el vals Peruano

La mujer en el vals peruano

"Angel hermoso a quien amar juré, / prenda querida que en mi mente estás, / paloma pura cuyo vuelo alcé, / dime ¿por qué no me amas ya?"... del vals 'Angel hermoso', conocido como el primer vals peruano con letra, que fue escrito en 1885 por Abelardo Gamarra 'El Tunante' y la música pertenece a su prima Zoila Gamarra.

Desde que se escribió el primer vals peruano con letra, éste fue hecho pensando en la mujer. Abelardo Gamarra le dedicaría la letra del vals "Angel hermoso" a su prima Zoila, una rubia muy hermosa que también era una eximia pianista por lo que fue ella la que le puso música a los versos que su belleza inspiraron marcando, a la vez, la activa presencia de la mujer en esa primera composición en género de vals peruano.

La mujer peruana, a través de los años, no sólo ha servido como fuente de inspiración de nuestros bardos criollos, sino que también nos ha deleitado con sus composiciones y su voz angelical que ha hecho latir, aceleradamente, muchos corazones de emoción.

Los valses de las primeras décadas del siglo XX le cantarían a la mujer, a su hermosura y también a otros sentimientos que le hacían sentir a nuestros compositores. Felipe Pinglo, el bardo inmortal, le pondría nombre de mujer a más de veinte de sus canciones. Mujeres que fueron la fuente de inspiración de las obras de Pinglo fueron: Amelia, Angélica, Carolina, Clotilde, Dolores, Dora, Emilia, Evangelina, Haydée, Hermelinda, Herminia, Jesús, Ketty, Lastenia, Luzmila, Matilde, Pamela, Porfiria, Rosalía, Rosa Luz y Victoria.

Durante las primeras décadas del siglo XX, el papel de la mujer en el vals peruano no sobresalía mucho. La compositora, folclorista e investigadora Rosa Mercedes Ayarza trabajaba en forma meticulosa en el rescate de infinidad de canciones de la costa que las llevó al pentagrama con la finalidad de que perduren al paso de los años. A ella se debe que más de 300 temas del folclore costeño se conozcan en la actualidad; temas que se hubiesen perdido de no haber sido por ese amor y devoción que ella sentía por la música de su tierra.

Fue en la década de los 30's en que la mujer empieza a brillar, con luz propia, en el vals peruano. Un día, a través de los micrófonos de la Radio Goicochea, se escucha la voz y la guitarra de una joven que entonaba los valses y rasgaba la guitarra de una manera tal que impresionó a todos los que la pudieron escuchar. Se trataba de Rosita Ascoy quien poco tiempo después, en 1936, formaría con su hermano Alejandro el dúo "La Limeñita y Ascoy" llevando, antes que termine dicha década, nuestra música popular y su arte al extranjero.

El año de 1937 vería nacer al dúo "Las Criollitas" conformado por Eloísa Angulo y Margarita Cerdeña. Sus voces se escuchaban a través de las ondas de Radio Lima y Radio Victoria. Ese mismo año año destacarían también "Las Estrellitas" conformado por las hermanas Luisa y Juana Estrella, a quienes dirigía y acompañaba el destacado músico y pianista Filomeno Ormeño.

Al año siguiente, empieza a hacerse conocida la figura de una muchachita que por sus grandes dotes como cantante es contratada para intervenir en las películas nacionales "Gallo de mi galpón", estrenada el 16 de junio de 1938; "El guapo del pueblo", estrenada el 1 de setiembre de 1938 y "Palomillas del Rímac", estrenada el 1 de diciembre de ese mismo año. Se trataba de Jesús Vásquez quien a los 17 años ya había participado en tres películas y su voz era muy elogiada en todos los ambientes donde se cultivaba nuestra música popular. Un año después, el miércoles 19 de julio de 1939, Jesús Vásquez sería coronada como "Reina de la Canción Criolla" en una función especial realizada en el antiguo Teatro Apolo de la Calle del Chirimoyo.

A fines de 1938, la canción criolla se engalana al sumarse a ella la poetisa Serafina Quinteras. Su nombre verdadero era Esmeralda González Castro, escritora y poetisa que escribió los versos de "La muñeca rota" para un concurso de la revista "Alta Voz", el cual ganó, a los cuales le puso música, en tiempo de vals, su prima Emma Castro (cuyo seudónimo era Joaquina Quinteras). En 1939, Serafina y Joaquina Quinteras nos entregarían también el hermoso vals "El ermitaño". Luego, en 1941, Serafina Quinteras escribe unos versos en homenaje a Felipe Pinglo que con música de Eduardo Márquez Talledo se convierte en el vals "Mi primera elegía". Su contribución con el cancionero popular sería notable.

No acababa de terminar la década de los 30's cuando otra gran poetisa se incorpora a la canción criolla, a pesar de su corta edad. Se trataba de Amparo Baluarte cuyo nombre se vuelve popular cuando en 1940, de tan sólo 14 años de edad, Amparo Baluarte le dedicó unos versos hermosos a la memoria de Felipe Pinglo, que con la música de Nicolás Wetzell se convirtió en el vals "Siemprevivas".

La década de los 40's fue una de las más fructíferas para la poesía de Amparo Baluarte y nuestro cancionero popular. Autora de aproximadamente 200 canciones entre valses, polcas, marineras, huaynos, himnos y otros, como pasillos y boleros, vivió inmersa en un mundo de versos, rimas, poemas y canciones.

Esther Granados ya cantaba en Radio Goicochea en 1939, pero en la década de los 40's se consagra como intérprete. ¡Qué tales voces femeninas que habían por ese tiempo!... A las ya consagradas, en talento pero jóvenes aún de edad, Jesús Vásquez y Eloísa Angulo, se suman Alicia Lizárraga, Delia Vallejos, Yolanda Vigil "La Peruana", Rosa Passano, Yolanda Matos, las hermanas Angélica y Norma Wetzell, Celia Miller, María Jesús Jiménez "La Calandria Criolla" y muchas voces más que engrandecen la canción criolla.

A fines de la década de los 40's empieza a surgir, como compositora, Isabel "Chabuca" Granda y al empezar la década de los 50's nacería el vals peruano más interpretado en el mundo, "La Flor de la Canela". Chabuca Granda termina de hacer "La Flor de la Canela" el 7 de enero de 1950 firmándolo con esa fecha en su cuaderno. En los años siguientes Chabuca Granda llenaría el pentagrama criollo con grandes composiciones que adquieren fama mundial, pero por esas cosas del destino, nuestra gran compositora fallece el 8 de marzo de 1983, fecha en que se celebra a nivel mundial el Día de la Mujer.

En los 50's, a las ya consagradas figuras se sumarían las hermanas Graciela y Noemí Polo que conformaban el dúo "Las Limeñitas"; Irma Céspedes, del dúo "Irma y Oswaldo"; Teresa Bolívar y surgiría también la figura de Alicia Maguiña quien desde adolescente ya componía hermosas canciones. Alicia Maguiña ha destacado como intérprete y excelente compositora y antes de que finalizara la década de los 50's ya había grabado su primer disco de larga duración que incluía sus valses "Inocente amor", "Viva el Perú y Sereno" y otras composiciones de ella.

La década de los 60's nos traería a Nedda Huambachano, Maritza Rodríguez y Cecilia Bracamonte, quien destacó como intérprete desde muchachita. También a Lucha Reyes "La Morena de Oro del Perú" quien alcanzó la fama como intérprete, recién, a fines de esa década y la mantuvo hasta el día de su partida el 31 de octubre de 1973, fecha en que se celebra el Día de la Canción Criolla.

En los 70's surgen Tania Libertad, Cecilia Barraza y Eva Ayllón. Los años siguientes nos traerían a Bartola, Susana Baca, Lucía de la Cruz, Lucila Campos y las hermanas Iraida y Pilar Valdivia.

El criollismo se sigue cultivando y surgen también nuevas voces en el firmamento criollo como Julie Freundt y Fabiola de la Cuba. La canción criolla se viste de gala con las voces de Claudia Aguirre, Marlene Guillén, Mayra Guzmán, Rosa Flor, Vilma Chávez, Katherine Cuadros, Jeannete Castro, Carmen Cruz, la cantautora Olga Milla y muchas voces femeninas más que siguen engrandeciendo nuestro acervo popular costeño.

No podemos dejar de reconocer el aporte que han hecho a la canción criolla mujeres como Bartola Sancho Dávila, Gina Dean, Ana Renner, Victoria Santa Cruz, María Gladys Pratz, Carmen Pinglo, Rosa Gutiérrez "Fetiche" y tantas mujeres más cuyos nombres se escapan a la memoria en estos momentos, pero que gracias a ellas podemos sentir que se acelera el latido de nuestros corazones cuando escuchamos un vals peruano... alimentan nuestras almas con sus composiciones y nos hacen suspirar de emoción con el sonido angelical de sus voces.


Dario Mejia
Melbourne, Australia
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