Pablo Casas
Pablo Casas Padilla nació el 13 de marzo de 1912 en la Calle Sequión, que era una calle extensa que comprende a las actuales seis cuadras de la Calle Huari, en los Barrios Altos de Lima. Autor de muchas canciones entre las cuales se encuentran los valses: "Anita", "Desengaño", "Digna", "Dos contra el mundo", "Humillado", "Juanita", "Mal proceder", "Olga", "Optimo", "Teresita", "Tiempos pasados" y "Vida".
Pablo Casas era sobrino de otro gran compositor barrioaltino, Nicanor Casas, por lo que la música criolla era una especie de herencia familiar para este gran compositor. Siendo niño, su familia se muda a un callejón grande de dos pisos en la Calle Plazuela de Santa Catalina, que también era conocida como Calle Pileta de Santa Catalina, actual cuadra 11 del Jr. Andahuaylas, por lo que su infancia transcurre entre las calles Santa Catalina, Mesa Redonda, Chirimoyo y La Confianza.
El primer instrumento que llegó a sus manos fue un rondín, el cual tocó maravillosamente hasta la adolescencia, cuando su abuelo, al observar las grandes cualidades musicales del nieto, le obsequió una guitarra. Pasado un tiempo, cuando llegó a dominar muy bien la guitarra, su figura se hizo presente en las jaranas que solían organizarse en las casas barrioaltinas.
A la edad de 17 años sufre su primera desilusión amorosa, pero, como producto de ese amor trunco, nace también su primer vals, "Desengaño", el cual se lo cantó a su amada frente a la puerta de su casa... "Una vez me quedé prendado / de una infiel mujer / que no me supo amar / por eso es que no quiero más amor / me basta con un engaño / que no quiero recordar..."
Las desilusiones amorosas de la juventud se superan rápidamente y Pablo Casas, superando su primer desengaño, vuelve a amar naciendo sus valses "Olga", "Mal proceder", "Tiempos pasados" y otros más.
Cuando en una oportunidad se encontraba haciendo música en la casa de José Moreno, con el Conjunto Abancay que lo integraban él, José Moreno, Néstor Rosas, Enrique Salinas y César Santa Cruz; se apareció Felipe Pinglo en la casa aquella. Pinglo, después de escucharlos los felicitó y le dijo a Casas que sabía de él y sus composiciones. Para sorpresa de Pablo Casas, Felipe Pinglo cantó los valses de Casas "Olga" y "Mal proceder".
En la única entrevista que le hicieron a Felipe Pinglo, realizada por el periodista Juan Francisco Castillo para el semanario "Cascabel" y publicada el sábado 25 de abril de 1936, cuando Pinglo se encontraba en su lecho de enfermo de la Sala Odriozola, en el Hospital Dos de Mayo, el periodista le preguntó a Pinglo sobre algún compositor ignorado, que a juicio de Pinglo, tenga méritos y porvenir. Pinglo respondió: "Conozco varios, creo que debo mencionar a Pablo Casas, un muchacho que ha compuesto con mucho acierto. De lo que más me agrada les citaré: 'Olga' y 'Mal proceder', un par de valses de mérito".
Ese año, 1936, llegó la consagración definitiva de Pablo Casas al componer el vals "Anita", que se puso de moda tanto en el Perú como en el extranjero. Anita, una trabajadora del Mercado Central, fue la musa a quien el compositor barrioaltino le dedicara ese hermoso vals. Anita fue la compañera y madre de los primeros hijos de Casas, falleciendo ella a temprana edad.
A inicios de la década de los 50's, Pablo Casas se traslada con su familia a la calle Aurelio Souza en Barranco. Allí se reunía con sus amigos de bohemia. Casi a finales de dicha década falleció Juanita, la esposa de Andrés Benites, amigo de Pablo Casas. El amigo aquel le pidió a Casas que le compusiera un vals en homenaje a su esposa querida y Pablo Casas, en el instante, empieza a entonar los primeros versos del vals "Juanita"... "Por más que el tiempo pasa, / no puedo olvidarla, / profunda es la pena / que lacera mi existir. / Conviértense en martirio / los días de mi vida, / por la mujer querida / que fue mi adoración. / Juanita se llamaba / mi amor, mi idolatría, / la única alegría / que reinaba en mi vivir...". El vals "Juanita" alcanzó rápida popularidad y es considerado uno de los clásicos de la música criolla, al igual que "Anita".
En una de las entrevistas que le hicieron, Casas dijo que él componía valses porque satisfacían una necesidad de liberar tensiones internas y era sincera expresión de creencias personales.
Al igual que muchos de los criollos de antaño, que fueron olvidados por las autoridades que no reconocieron el gran aporte de ellos hacia nuestra música, Pablo Casas terminó sus días con una irrisoria pensión del Estado. Falleció el 16 de enero de 1977 en el Hospital Santo Toribio de Mogrovejo, pero su vals "Anita" y sus demás composiciones siguen siendo interpretadas por los mejores exponentes de nuestro criollismo actual.
ANITAAutor: Pablo Casas
Quisiera confesarte mi cariño,quisiera que comprendas mi dolor,no sé como podré explicarmi afecto, mi pasión, mi amor,mas temo el llegar a fracasar.
Tal vez será por falta de optimismoque me haga rehusar mi confesión;no puedo soportarlo más,presiento que me aceptarás,entonces por mi triunfo cantaré.
Feliz seré,entre tus brazos me enterneceréy a los acordes de un modesto vals,la dicha entera te la brindaré.
Anita ven,a acariciarme como anhelo yo,si tú comprendes bien la realidad,no atormentes, por piedad, mi ser.
Dario MejiaMelbourne, Australia
Pablo Casas Padilla nació el 13 de marzo de 1912 en la Calle Sequión, que era una calle extensa que comprende a las actuales seis cuadras de la Calle Huari, en los Barrios Altos de Lima. Autor de muchas canciones entre las cuales se encuentran los valses: "Anita", "Desengaño", "Digna", "Dos contra el mundo", "Humillado", "Juanita", "Mal proceder", "Olga", "Optimo", "Teresita", "Tiempos pasados" y "Vida".
Pablo Casas era sobrino de otro gran compositor barrioaltino, Nicanor Casas, por lo que la música criolla era una especie de herencia familiar para este gran compositor. Siendo niño, su familia se muda a un callejón grande de dos pisos en la Calle Plazuela de Santa Catalina, que también era conocida como Calle Pileta de Santa Catalina, actual cuadra 11 del Jr. Andahuaylas, por lo que su infancia transcurre entre las calles Santa Catalina, Mesa Redonda, Chirimoyo y La Confianza.
El primer instrumento que llegó a sus manos fue un rondín, el cual tocó maravillosamente hasta la adolescencia, cuando su abuelo, al observar las grandes cualidades musicales del nieto, le obsequió una guitarra. Pasado un tiempo, cuando llegó a dominar muy bien la guitarra, su figura se hizo presente en las jaranas que solían organizarse en las casas barrioaltinas.
A la edad de 17 años sufre su primera desilusión amorosa, pero, como producto de ese amor trunco, nace también su primer vals, "Desengaño", el cual se lo cantó a su amada frente a la puerta de su casa... "Una vez me quedé prendado / de una infiel mujer / que no me supo amar / por eso es que no quiero más amor / me basta con un engaño / que no quiero recordar..."
Las desilusiones amorosas de la juventud se superan rápidamente y Pablo Casas, superando su primer desengaño, vuelve a amar naciendo sus valses "Olga", "Mal proceder", "Tiempos pasados" y otros más.
Cuando en una oportunidad se encontraba haciendo música en la casa de José Moreno, con el Conjunto Abancay que lo integraban él, José Moreno, Néstor Rosas, Enrique Salinas y César Santa Cruz; se apareció Felipe Pinglo en la casa aquella. Pinglo, después de escucharlos los felicitó y le dijo a Casas que sabía de él y sus composiciones. Para sorpresa de Pablo Casas, Felipe Pinglo cantó los valses de Casas "Olga" y "Mal proceder".
En la única entrevista que le hicieron a Felipe Pinglo, realizada por el periodista Juan Francisco Castillo para el semanario "Cascabel" y publicada el sábado 25 de abril de 1936, cuando Pinglo se encontraba en su lecho de enfermo de la Sala Odriozola, en el Hospital Dos de Mayo, el periodista le preguntó a Pinglo sobre algún compositor ignorado, que a juicio de Pinglo, tenga méritos y porvenir. Pinglo respondió: "Conozco varios, creo que debo mencionar a Pablo Casas, un muchacho que ha compuesto con mucho acierto. De lo que más me agrada les citaré: 'Olga' y 'Mal proceder', un par de valses de mérito".
Ese año, 1936, llegó la consagración definitiva de Pablo Casas al componer el vals "Anita", que se puso de moda tanto en el Perú como en el extranjero. Anita, una trabajadora del Mercado Central, fue la musa a quien el compositor barrioaltino le dedicara ese hermoso vals. Anita fue la compañera y madre de los primeros hijos de Casas, falleciendo ella a temprana edad.
A inicios de la década de los 50's, Pablo Casas se traslada con su familia a la calle Aurelio Souza en Barranco. Allí se reunía con sus amigos de bohemia. Casi a finales de dicha década falleció Juanita, la esposa de Andrés Benites, amigo de Pablo Casas. El amigo aquel le pidió a Casas que le compusiera un vals en homenaje a su esposa querida y Pablo Casas, en el instante, empieza a entonar los primeros versos del vals "Juanita"... "Por más que el tiempo pasa, / no puedo olvidarla, / profunda es la pena / que lacera mi existir. / Conviértense en martirio / los días de mi vida, / por la mujer querida / que fue mi adoración. / Juanita se llamaba / mi amor, mi idolatría, / la única alegría / que reinaba en mi vivir...". El vals "Juanita" alcanzó rápida popularidad y es considerado uno de los clásicos de la música criolla, al igual que "Anita".
En una de las entrevistas que le hicieron, Casas dijo que él componía valses porque satisfacían una necesidad de liberar tensiones internas y era sincera expresión de creencias personales.
Al igual que muchos de los criollos de antaño, que fueron olvidados por las autoridades que no reconocieron el gran aporte de ellos hacia nuestra música, Pablo Casas terminó sus días con una irrisoria pensión del Estado. Falleció el 16 de enero de 1977 en el Hospital Santo Toribio de Mogrovejo, pero su vals "Anita" y sus demás composiciones siguen siendo interpretadas por los mejores exponentes de nuestro criollismo actual.
ANITAAutor: Pablo Casas
Quisiera confesarte mi cariño,quisiera que comprendas mi dolor,no sé como podré explicarmi afecto, mi pasión, mi amor,mas temo el llegar a fracasar.
Tal vez será por falta de optimismoque me haga rehusar mi confesión;no puedo soportarlo más,presiento que me aceptarás,entonces por mi triunfo cantaré.
Feliz seré,entre tus brazos me enterneceréy a los acordes de un modesto vals,la dicha entera te la brindaré.
Anita ven,a acariciarme como anhelo yo,si tú comprendes bien la realidad,no atormentes, por piedad, mi ser.
Dario MejiaMelbourne, Australia
1 comentario:
muchas gracias por la resenia historica acerca del compositor de este hermoso vals. Y felicitaciones por el aporte que hacen en esta pagina para todos aquellos que buscamos informacion acerca de nuestra musica criolla.
VIVA EL PERU.
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